Como adelantaba Investing a primera hora de este 15 de noviembre de 2018: «El acuerdo alcanzado no está exento de riesgos».
Lo decían los analistas de Banca March:
«De la parte británica, el acuerdo se enfrenta ahora al escollo que supone su aprobación en el Parlamento del país, en donde las posturas se encuentran muy divididas. No se descartan, asimismo, dimisiones en el seno de su Gobierno o la posibilidad de que una parte del grupo parlamentario conservador solicite la apertura de un proceso interno para deponer a Theresa May».
Y así ha sido: A la dimisión del ministro del Brexit, Dominic Raab, y de dos miembros de su equipo, se habría sumado la ministra de Trabajo, Esther McVey.
La reacción de los mercados ha sido inmediata, con las bolsas europeas dándose la vuelta y cotizando en estos momentos en negativo.
«Las dimisiones tras el acuerdo técnico sobre el Brexit están haciendo mucho daño porque nos acercan a un divorcio sin acuerdo. Recuerden que todavía tiene que pasar por el Parlmento. A 60 minutos, el EUR/GBP se dispara nada menos que un 1,61%. No pierdan de vista la alta volatilidad previa«, advierte Jose Luis Cárpatos, CEO de Serenity Markets.
Con una libra en mínimos y las bolsas en rojo, esta oleada de dimisiones está haciendo daño también a la banca. Barclays (LON:BARC) pierde un 6,81% y Lloyds Banking Group (LON:LLOY) un 4,98%. Una caída que se ha extendido a gran parte de las entidades europeas. Por ejemplo, Unione di Banche Italiane SpA (MI:UBI) baja un 2%, Banca Monte dei Paschi di Siena (MI:BMPS) un 1,98%, Commerzbank (DE:CBKG) un 1,96%, Deutsche Bank (DE:DBKGn) un 1,67%, BNP Paribas (PA:BNPP) un 1,48%, Banco Santander (MC:SAN) un 1,43%, Banco Sabadell (MC:SABE) un 0,5% y CaixaBank (MC:CABK) un 0,24%.
No se hace fácil por tanto para May lo que los expertos resumían como el gran reto. Eso apuntaban antes de la apertura del mercado en Link Securities:
«Convencer a los partidarios del Brexit, que consideran que se queda corto, y a los partidarios de permanecer en Europa, que consideran que va demasiado lejos».
Los analistas de Renta 4 (MC:RTA4), por su parte, recordaban:
«el rechazo entre los euroescépticos apunta a que la aprobación del borrador en el Parlamento podría ser complicada.
Recordamos que May no tiene mayoría y su partido conservador está dividido. Necesita 320 votos para la mayoría, de un total de 650 del Parlamento, pero de los que solo 639 votan (el resto son el portavoz, sus diputados y siete miembros del Sinn Fein que no votan). Los conservadores podrían darle en torno a 235 votos casi seguros, por lo que necesitaría otros 85″.
