Sin duda es uno de los sectores con mayor economía sumergida en el país, y aunque la idea parece necesaria y justa, no va a ser tan sencillo aplicarla debido al volumen de ceremonias que se celebran al año.
La norma fiscal española es clara: los regalos que reciben los novios en las bodas se tienen que declarar para abonar el impuesto de donaciones, que es, en todo caso, una figura autonómica.
Así lo han confirmado a okdiario fuentes de Hacienda y de la Agencia Tributaria, que insisten, eso sí, en que no se ha hecho ninguna cruzada especial en Asturias, tal y como han advertido diversos medios, sino que siempre se han realizado inspecciones de este tipo en todo el ámbito nacional, según recoge Borja Jiménez en okdiario.
Las mismas fuentes apuntan a que, por norma general, lo que vigila el fisco en las bodas no son tanto los regalos -que también-, sino las actividades que se celebran en el banquete, es decir, por ejemplo, los restaurantes, las actuaciones o los fotógrafos.
El objetivo de la Agencia Tributaria pasa por pedir a los novios las cuentas de estos proveedores para contrastarlas con las de estos mismos proveedores y comprobar que cumplen con sus obligaciones tributarias.
«Se solicita información para contrastar lo que facturan», señalan desde la Agencia Tributaria.
Hacienda, por cierto, puede reclamar facturas a los novios en los cuatro ejercicios fiscales siguientes a la boda. Y, sobre los regalos, aunque Hacienda no suele investigarlos, sí pone la lupa en aquellas transferencias superiores a los 3.000 euros y a los movimientos del denominado ‘Bin Laden’, el billete de 500 euros.
Por el contrario, el fisco no suele vigilar el tradicional sobre con unos 200 euros que los invitados suelen dar a los novios, pero cabe insistir en que, por norma, también debe cumplir con el impuesto de donaciones.
En conclusión, la psicosis formada alrededor de una supuesta ‘redada’ en Asturias hacia los recién casados ha sido en vano pues, como han explicado desde la Agencia Tributaria a okdiario, siempre se han controlado este tipo de eventos.
Más que por los regalos, para detectar posibles fraudes en las empresas proveedoras de los novios. Sin embargo, los regalos de las bodas sí podrían ser objeto de multa si no se ha cumplido con Hacienda en el impuesto de donaciones, y más aún si ese regalo es un sobre -o transferencia- con más de 3.000 euros.
