La pandemia del COVID-19 ha significado indudablemente un impacto económico significativo para las familias españolas. La economía española, que es dependiente en gran parte del turismo, se ha visto seriamente afectada desde que en Marzo de 2020 dio comienzo este fenómeno histórico que tanto ha cambiado nuestra vida en los últimos meses. Las restricciones a la movilidad de la población, junto con el cierre temporal de ciertos negocios y lugares de trabajo, ha supuesto un deterioro del consumo en general, y especialmente, de aquellos productos categorizados como no esenciales. Las compras por internet han aumentado exponencialmente en los últimos meses, no obstante, el internet facilita la compra de productos de reducido tamaño fáciles de transportar y dificulta la compra de productos de mayor tamaño como automóviles, muebles o electrodomésticos del hogar.
Desde Marzo de 2020 la venta de estos productos de mayor tamaño y coste se ha visto afectada considerablemente, tanto por las restricciones a la movilidad como por el impacto económico de la pandemia. En el caso de los electrodomésticos del hogar, este deterioro en el número de ventas ha significado que la reparación de estos aparatos se haya disparado. De acuerdo a Alejandro Duque, director de Servitec SAT, empresa valenciana independiente de SAT, la demanda de servicios de reparación de electrodomésticos del hogar ha aumentado de manera considerable en la ciudad de Valencia: «comparado con la época pre-pandemia estimaríamos que el aumento de la demanda de nuestros servicios de reparación es de entorno al 70%».
Este aumento en la demanda de servicios de reparación, ha significado que los talleres independientes de los servicios técnicos oficiales de las marcas se hayan convertido en fundamentales para realizar los servicios con rapidez. «Por poner un ejemplo, nuestro equipo de servicio técnico Fagor Valencia tiene la capacidad de acudir al domicilio de los clientes para realizar reparaciones en frigoríficos, lavadoras, lavavajillas o secadoras Fagor en un período inferior a 48 horas cuando el servicio técnico oficial tardaría mínimo una semana en tener disponibilidad», indica Alejandro.
La demanda de técnicos cualificados y con experiencia en la reposición de electrodomésticos también ha aumentado considerablemente. No obstante, la oferta de estos profesionales es escaza, ya que el oficio de técnico reparador se encontraba en vías de extinción antes de la pandemia.
En conclusión, la pandemia ha afectado el consumo de ciertos artículos no esenciales, entre ellos los electrodomésticos del hogar, lo que ha disparado los servicios de reparación de los mismos. La escasez de personal cualificado en el área de servicio técnico significa que talleres independientes de los servicios oficiales estén jugando un papel fundamental a la hora de paliar la demanda de servicios de asistencia técnica en constante aumento. Es posible que esta tendencia sea una tendencia pasajera o podría estar aquí para quedarse en el mundo post-pandemia.
Fuente Comunicae