La medicina reproductiva tiene en estos momentos un objetivo muy claro, reducir al máximo los tiempos para lograr el embarazo. En un tratamiento de fertilidad, el tiempo juega en contra de los pacientes, bien porque su edad comienza a estar en el límite y la biología sigue su camino o, entre otras, por patologías que, con el paso de los meses, pueden imposibilitar la gestación.
La inteligencia artificial es ya una valiosa herramienta para los especialistas y actualmente, en reproducción asistida, el objetivo es evitar tratamientos largos, con transferencias fallidas, que suponen un desgaste emocional para la paciente y un gasto económico. Son dos de las principales razones para dar un impulso a la IA, según explica la directora científica de la madrileña Clínica Tambre, la doctora Ángela Llaneza, centro que ha sido pionero en la implantación de la IA en su día a día. «Nuestro objetivo es que a través de la mejor tecnología y los ginecólogos más expertos, la paciente logre su embarazo en el menor tiempo posible, evitando transferencias inútiles que solo añaden desgaste emocional y aumentan el gasto del tratamiento» y remarca que «queremos que los tratamientos sean lo más eficientes posibles».
La experta en fertilidad pone como un ejemplo del compromiso de Tambre un proyecto que se está llevando a cabo para mejorar la valoración del endometrio y poder determinar el momento más adecuado para hacer la transferencia embrionaria a través de un algoritmo. Actualmente, la clínica está colaborando con la impulsora de start ups HoMu Health Ventures, con base en Barcelona, y una de las más importantes del mundo en el sector de la medicina reproductiva, que fomenta investigaciones y estudios en materia de reproducción asistida y genómica, entre otros.
Proyecto Matris
La clínica madrileña, con 45 años en el sector, y que ha sido una de las pioneras en el uso de big data para introducir mejoras en reproducción asistida, está lleva a cabo un estudio a nivel clínico para mejorar la clasificación del endometrio, y ello con el desarrollo de un sistema basado en IA que predice el momento en el que el endometrio de la futura madre es completamente receptivo para el éxito de la implantación. La doctora Llaneza, explica que el proyecto Matris, «es un original desarrollo tecnológico de inteligencia artificial (IA) producido en Canadá que permite, por medio de imágenes ecográficas, predecir qué endometrios están más preparados para recibir un embrión y, por lo tanto, dar lugar a un embarazo».
Con Matris, el ginecólogo puede considerar el mejor momento para realizar la transferencia del embrión y apoyado por el algoritmo, valorar si su opinión coincide con los datos que ofrece la IA. «Estamos entrenando el algoritmo con miles de fotos y con datos de pacientes», indica la experta. «El objetivo que tiene la clínica es que la paciente llegue al embarazo lo antes posible».
Sistema no invasivo
Este novedoso sistema tiene la ventaja de que no es invasivo. Realiza el análisis dos días antes de que se produzca la transferencia embrionaria programada. Y permite tomar importantes decisiones como aplazar ese momento si el endometrio no está en las condiciones adecuadas para recibir al embrión. La doctora Llaneza explica que el sistema aporta datos objetivos al especialista en relación con la idoneidad del tejido endometrial y sugiere, en algunos casos, que deba cancelarse la transferencia. Esto aporta una ventaja fundamental y es evitar que se pierda un embrión que no implantará en el útero materno porque este no está preparado. Un embrión que, en otras circunstancias, podrá dar lugar a un embarazo evolutivo y el nacimiento de un bebé.
La directora científica de la Clínica Tambre y ginecóloga especialista en fertilidad destaca que este es, sin duda, un paso más y un gran avance en reproducción asistida. Por su parte, el asesor científico de Tambre, el doctor José Horcajadas, hace hincapié en que este algoritmo ya ha sido validado en clínicas internacionales de prestigio. «Actualmente, está accesible en la clínica Tambre de Madrid de forma experimental y gratuita para mejorar de forma «inteligente» la tasa de embarazo en las mujeres sometidas a técnicas de fecundación in vitro (FIV)», explica el científico.
Tambre, pionera en el uso de la IA
Tambre tiene en marcha varias líneas de investigación relacionadas con la IA y con el objetivo puesto en la reducción de los tiempos para lograr el embarazo. Participó en la validación de algoritmos que a través de IA pueden mejorar la selección embrionaria, algoritmos que ahora se están usando en clínicas de todo el mundo; y ahora las pacientes «van a poder también beneficiarse del programa CHLOE que asesora a los embriólogos expertos para encontrar el mejor embrión para llegar al embarazo cuanto antes. «Tambre ha participado en la fase de desarrollo, siendo pioneros en España en el desarrollo de esta tecnología basada en IA», resalta la doctora Llaneza.
Otra de las aplicaciones de la IA en Tambre es el sistema con el que se encuentra a los donantes más adecuados para las parejas que usan óvulos, espermatozoides o ambos gametos para tener a su bebé. La tecnología Fenomatch permite usar miles de datos para lograr la mayor compatibilidad biométrica entre el futuro bebé y sus padres. Lograr el mayor parecido físico y genético con las familias es el objetivo primordial de esta tecnología puntera.
Fuente Comunicae