Las empresas especializadas en la promoción de viviendas vacacionales en la costa se han puesto contentos. De Londres llega el runrún de que el Gobierno Blair prepara una normativa para equiparar en rentabilidad la compra de la segunda vivienda con los planes de pensiones. Faltan detalles, pero eso abriría la espita para que de repente, miles de británicos decidan lanzarse a comprar casa en España.
Reino Unido es el principal ‘proveedor’ de compradores extranjeros en España. Por otro, la demanda procedente de fuera de las fronteras patrias está asegurada, al menos, para los próximos tres años.
Según los cálculos de algunos profesionales, las más de 55.000 casas adquiridas por ciudadanos foráneos el año pasado crecerán exponencialmente hasta 2008, cuando se venderán más de 75.000 unidades inmobiliarias a propietarios internacionales.
