Un edificio… de anuncio

Un edificio... de anuncio

La colocación de soportes publicitarios, como rótulos, murales o lonas es una buena solución para sanear las cuentas de la comunidad de vecinos. Para muchos, la ciudad no sería la misma sin ellos. Se trata de los anuncios publicitarios en los edificios, un elemento que ha hecho míticos a algunos inmuebles y que ha solucionado las cuentas de muchas comunidades de vecinos.

Luminosos, murales, lonas… Son muchos los soportes que ofertan las empresas especializadas. Para participar de sus beneficios, lo primero es aprobar en una junta de vecinos su instalación. Si el alquiler del espacio priva a los vecinos del disfrute de un área común, como una azotea, será necesaria la unanimidad; en caso contrario, bastará con el acuerdo de las tres quintas partes y de los vecinos afectados por la publicidad, según publica Javier Merino en 20minutos.es

Son los municipios los encargados de regular estas instalaciones. Tras comprobar que el soporte no altera la estética ni las medidas de evacuación de la finca y que cumple todas las reglas de seguridad, el Ayuntamiento concederá una licencia por cinco años renovables. Todas las instalaciones deben pasar una revisión anual para verificar su buen estado. En caso de incumplimiento de las ordenanzas, la multa para la empresa gestora puede llegar a los 20.000 euros.

El presidente será el encargado de negociar el contrato, que deberá especificar el periodo de explotación, las condiciones y los precios. Éstos varían en función del soporte y la situación del inmueble. Así, un luminoso o una lona pueden llegar en los barrios más comerciales a los 10.000 y 30.000 euros mensuales, respectivamente. Conviene exigir un seguro que cubra los daños que el soporte pudiera causar.

La forma de pago es distinta dependiendo de los casos. Según el Colegio Profesional de Administradores de Fincas de Madrid, se puede pagar a cada propietario según su cuota de participación o ingresar el dinero del alquiler en el fondo de la comunidad para los gastos del inmueble.

El negocio de las antenas

A pesar de que los científicos todavía no se han puesto de acuerdo sobre el grado de peligrosidad de la exposición a las ondas electromagnéticas que emiten, cada vez más comunidades de vecinos están optando por la instalación de antenas de telefonía móvil como un medio para sufragar sus gastos. Estas antenas, que también necesitan una licencia municipal y que deberán pasar una inspección anual de mantenimiento, no podrán situarse en las inmediaciones de colegios u hospitales. Los beneficios para la comunidad de propietarios pueden llegar a más de 10.000 euros anuales, precio del alquiler que también depende de la ubicación del inmueble.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído