El Banco Central Europeo (BCE) ha subido los tipos de interés para la eurozona por sexta vez desde diciembre del año pasado. El incremento ha sido de 0,25 puntos porcentuales, hasta el 3,5%. Esto los deja en su nivel más alto desde septiembre de 2001.
Para 2007, la mayoría de los analistas espera una subida más del precio del dinero de 0,25 puntos porcentuales, posiblemente, en el primer trimestre, según una encuesta de la agencia Dow Jones.
Sin embargo, la reciente apreciación del euro ha hecho que muchos expertos se planteen si el BCE renunciará a acometer nuevas subidas para no lastrar la economía europea.
‘Apretar más el cinturón’
Para el catedrático y director de Análisis Financiero de la fundación de cajas de ahorros Funcas, Santiago Carbó, esta nueva subida tipos no tendrá efectos destacados en la economía de las familias más allá de «apretarles un poco más el cinturón» y tampoco las desanimará a la hora del consumo, y menos en esta época navideña, caracterizada por el gasto.
Además, explicó que no hay que olvidar que los efectos de las subidas del precio del dinero son «pequeños», porque aunque los tipos han subido casi dos puntos en el último año, seguimos en un contexto históricamente bajo y estamos aún muy lejos del nivel de hace unos años.
En cuanto a la tendencia que seguirán los tipos en 2007, Carbó no descartó que se vayan a producir nuevas subidas, la primera «en enero o febrero», aunque en ningún caso serán tan numerosas como este año, aseguró.
De todas formas, hay que esperar a ver qué pasa con la inflación en la eurozona y con el precio del petróleo, ya que si ambos están contenidos, «ya no está tan claro» que sea necesario seguir subiendo el precio del dinero.
El experto de Analistas Financieros Internacionales José Manuel Amor estimó que los tipos en la eurozona subirán hasta el 3,75% en el primer trimestre, a lo que añadió que hay cierto riesgo, aunque no muy elevado, de que puedan llegar al 4%.
Tras los incrementos del 2006, los tipos no «harán mucho ruido» y protagonizarán subidas moderadas que llevarán al euribor a estabilizarse y no crecer en más de diez o quince puntos básicos.
