Hipotecas compartidas: ¿una nueva forma de comprar vivienda?

Este otoño hemos asistido al nacimiento de un nuevo tipo de hipoteca: la hipoteca compartida. Las entidades bancarias, ante un momento en el que la deuda de las familias se desacelera por primera vez desde 2003 y en el que el precio de las viviendas crece a un ritmo más lento, los prestadores de dinero reinventan antiguos conceptos.

Qué es una hipoteca compartidaUna hipoteca compartida es un producto financiero en el que varias personas sin ningún vínculo familiar se juntan para pagar la hipoteca a medias. Como todo en esta vida, el concepto no es nuevo, y esta fórmula era utilizada por sociedades para invertir en grandes inmuebles o fincas. Además, lleva un tiempo practicándose en el Reino Unido, donde el precio de la vivienda también es elevado.

El objetivo es poder comprar una vivienda de una forma asequible, y a la vez dar una alternativa al pago del alquiler mensual. Además, también se presenta como una inversión para el futuro: cuando se vende el inmueble pasados unos años, con los beneficios obtenidos se puede empezar a pagar otro piso sin compartir.

Cajas de ahorro como la BBK ofrecen desde noviembre este producto. Las condiciones generales son semejantes a otros tipos de créditos hipotecarios, excepto en algún detalle. Por ejemplo, esta entidad propone ?un plazo máximo de amortización de 40 años, siempre que la suma de la edad del menor de los propietarios y el plazo establecido no supere los 80 años?. Además, se recomienda que el máximo de compradores se fije en función del número de habitaciones que disponga la vivienda. Después, entre los copropietarios, se decidirá si todos pagan la misma cuota o no.

A quién está dirigido este productoLos principales destinatarios de este tipo de hipotecas son:

– Solteros (10.775.000 en 2004 según datos del Instituto Nacional de Estadística).
– Jóvenes que quieren independizarse pero debido a su sueldo no pueden.
– Personas que por motivos laborales cambian de ciudad y en lugar de pagar un alquiler prefieren invertir adquiriendo un inmueble.
– Inmigrantes.
– Separados y divorciados.

Inconvenientes y soluciones
Son dos los principales inconvenientes en este tipo de situaciones. El primero de ellos y principal estriba en la posibilidad de que sólo uno de los hipotecados decida en el futuro vender el inmueble y se encuentre con la oposición del resto. Para este tipo de casos, se recomienda que antes de contratar la hipoteca se lleguen a una serie de pactos que eviten estas complicaciones en el futuro. Se trata de un contrato privado, que no es obligatorio, y que no afecta a la hora de conceder una hipoteca.

La segunda desventaja, pero no menos importante, es si uno de los titulares del préstamo deja de pagar. En este caso, la entidad financiera pedirá cuentas solamente al moroso, y el resto de propietarios no deberá hacerse cargo de la deuda. Si no se llega a ninguna solución, el resto de propietarios puede buscar a otra persona que asuma la deuda. Sólo en casos extremos tendrá que venderse el inmueble.

En conclusión, la hipoteca compartida es un producto muy nuevo en España y habrá qué ver la aceptación que tiene. ¿Solución a la compra de vivienda o quebradero de cabeza?

Fuente Atrea.com

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído