(PD).- El escándalo montado por el anunciado fichaje de David Taguas, ex responsable de la Oficina Económica de La Moncloa, por la asociación de empresas constructoras de ámbito nacional, SEOPAN, podría quedar en papel mojado.
Varias fuentes del sector consultadas por El Confidencial y publicado po Aníbal González, han mostrado su convencimiento de que el Gobierno Zapatero aprovechará el dictamen sobre la supuesta adecuación del mismo a la Ley de Incompatibilidades, encargado al Ministerio de Administraciones Públicas, para bloquear definitivamente ese fichaje, que dentro y fuera del sector se considera una bomba de relojería en la línea de flotación del presidente del Gobierno.
En la misma línea se ha manifestado en los últimos días ante amigos muy cercanos el propio Taguas, “muy cabreado con Zapatero porque considera que le ha dejado a los pies de los caballos”, tras la declaración presidencial según la cual se había visto “desagradablemente sorprendido” por ese fichaje. Entre los grandes popes de la construcción que el pasado 30 de abril participaron en la junta directiva de SEOPAN que adoptó el acuerdo, existe el convencimiento, a la luz de las explicaciones facilitadas por Luis del Rivero (Sacyr), de que Rodríguez Zapatero conoció y dio el visto bueno (ver noticia) a esa contratación, pero que luego ha dado marcha atrás al calibrar la dimensión del escándalo producido.
“Taguas está convencido de que su fichaje acabará frustrándose por la vía de ese informe definitivo solicitado por el Gobierno”, aseguran las fuentes, y que podría ver la luz en las próximas horas. “Zapatero está acostumbrado a jugar con fuego y, como buen político que es, a desmentirse sobre la marcha. ¿Qué necesidad tiene de crearse él mismo un escándalo que le van a restregar a lo largo y ancho de toda la legislatura? Lo lógico es que se quite ese muerto -un muerto recurrente, además- de encima utilizando el informe de marras, diciendo que hay incompatibilidad y asunto concluido”.
“Estamos ante una operación fallida”
Taguas no ha firmado aún el contrato que le liga a SEOPAN, asociación que agrupa a las 33 mayores empresas constructoras españolas, en espera de ese informe. El responsable de una de las grandes firmas del sector, consultado por este diario, ha asegurado que “pase lo que pase con ese papel, estamos ante una operación fallida, porque desde el punto de vista de los intereses del grupo David Taguas ya es un personaje quemado, diría incluso que achicharrado, porque siempre que tenga que hacer una gestión o ir a ver a un ministro, y no digamos ya al propio Zapatero, la sombra de este escándalo va a estar planeando sobre él. Desde el punto de vista operativo, el valor de este fichaje para nosotros es cero”.
“Eso sin olvidar que aquí cada empresa se busca las lentejas por su cuenta”, prosigue la fuente. “Aldama era alguien cuando nos reunía ante el ministro de turno y lanzaba su speech en nombre del sector, porque a la hora de buscar cartera de obra cada cual se busca la vida como puede. El revuelo montado por este fichaje va a obligar al propio Taguas a quedarse quieto. Por desgracia, este hombre ha llegado a SEOPAN con las alas cortadas”.
