(PD).-Ni plan de rescate ni bajada de tipos. El Euribor se corta solo con una subida de más de dos centésimas en su cotización diaria y marcaba el 5,512 por ciento pese a la bajada de tipos de interés acordada ayer por los principales bancos centrales del mundo, con lo que la media mensual de octubre podría superar el 5,5 por ciento. Los hipotecados seguirán con la soga al cuello.
En los últimos doce meses el Euribor, el indicador más utilizado para el cálculo de hipotecas, ha oscilado entre el mínimo intradía del 23 de enero de este año, en el 4,287 por ciento, y el máximo histórico que alcanzó el pasado 2 de octubre, en el 5,526 por ciento.
En estos diez meses el indicador ha pasado del 4,498 por ciento con el que cerró enero al máximo histórico mensual alcanzado en julio, en el 5,393 por ciento.
En agosto retrocedió hasta el 5,323 por ciento, para volver a remontar en septiembre hasta el 5,384 por ciento.
En las siete jornadas negociadas en lo que va de mes el Euribor no ha bajado ningún día del 5,48 por ciento, con lo que la media mensual supera ya el 5,50 por ciento.
Tras la bajada de tipos de ayer, la Asociación Hipotecaria señaló que ésta era «muy positiva» para los hipotecados, y expresó su confianza en que se reflejara a corto plazo en el Euribor y, posteriormente, en las cuotas de las hipotecas suscritas.
Los analistas consultados por Efe, que preveían un recorte de aproximadamente un cuarto de punto en su cotización de hoy, han mostrado su extrañeza por este repunte y han expresado su desconocimiento sobre cuándo volverá la confianza al mercado interbancario, requisito imprescindible para que el indicador modere su escalda alcista.
El Euribor, que suele subir cuando el BCE tiene previsto subir los tipos de interés, se encuentra ahora distorsionado por la falta de confianza entre entidades y la crisis de liquidez de los mercados.
De momento, y con los datos del mes de octubre, una hipoteca contratada hace un año por un importe medio de 150.000 euros con un plazo de amortización de 25 años experimentaría un incremento de casi 80 euros al mes o más de 900 euros al año.
