Al final de año habrá un millón de pisos nuevos sin vender

(PD).- La foto fija del sector inmobiliario no cambia sustancialmente, a juzgar por los datos aportados ayer por la tasadora de las cajas de ahorros, Tinsa.

Explica Miguel Larrañaga en ABC que el mercado atraviesa por un parón de la demanda que retrotrae las ventas a niveles de la crisis de los años 1993 y 1994 y, sin embargo, los precios no caen en la medida que cabría suponer con una crisis de este calado.

Las estadísticas de Tinsa reflejan que los precios han caído entre septiembre del pasado año y el mes pasado en un 4,9% y que el sector acumula ya un «stock» de viviendas sin vender de unas 680.000 unidades.

Según las estimaciones de la tasadora, ante el ritmo de las ventas y el de llegada de nuevas viviendas al mercado, cuyas obras se iniciaron hace dos años en pleno «boom», es posible que a finales de año el número de viviendas sin vender pueda aproximarse al millón de unidades.

En concreto, el director general de Tinsa, Luis Leirado, estimó ayer en torno a las 930.000 las viviendas que a final de año estarán en el mercado sin que sus promotores hayan conseguido venderlas.

Leirado apuntó, además, que la retracción de la demanda hace muy complicado absorber este «stock» en breve plazo y apuntó su opinión de que al ritmo de ventas actual se tardará al menos dos años en volver a una situación de mercado normal, entendiendo por normalidad, un «stock» de alrededor de un 20% del total.

La situación del mercado se resume en un cálculo realizado por el director general de Tinsa que, tras estimar que este año se venderán en torno a 300.000 viviendas, recalcó que «supone volver a cifras de los años 1993 y 1994».

Para el director general de Tinsa, el problema del mercado se resume en una demanda que no se decide a comprar en estas condiciones y unos promotores que se resisten a rebajar más los precios «porque en muchos casos no pueden, al haber comprado el suelo a precios que no les dejan margen».

Para Leirado, si las circunstancias no cambian radicalmente en los próximos meses, puede llegar el momento en el que algún promotor tenga que empezar a valorar la posibilidad de vender a cualquier precio antes que perderlo todo, pero no cree que esta vaya a ser la tónica general.

Como se recordará, el presidente de la Asociación de Promotores, Guillermo Chicote, negó hace unos días que las bajadas puedan agudizarse al subrayar que antes de rebajar los precios un 40% le regalaría la promoción al banco.

Mayor caída en las ciudades
En cuanto a precios, el índice elaborado por Tinsa (IMIE) refleja una caída interanual del 4,9% en septiembre, tres décimas peor que en agosto y confirmando la tendencia hacia tasas más negativas que comenzó hace siete meses.

Por áreas, en las grandes ciudades los precios han caído un 6,5% en el último año, en las áreas metropolitanas el descenso ha sido del 7,1%, mientras que en el «resto de municipios» la tendencia negativa es mucho más suave, con sólo un 1,7% de retroceso.

Curiosamente, en la vivienda de costa se ha notado una leve mejoría en el ritmo de caída de los precios, ya que en agosto bajaban un 8,3% interanual y en septiembre han limitado el descenso al 5,3%. Leirado indicó que esta mejoría puede deberse a factores estacionales.

En cuanto a las islas, Tinsa considera que su evolución es tradicionalmente independiente de la del resto del mercado español. Aún así, el descenso de los precios en los mercados insulares se situó en el 4,4%.

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