(PD).-La deuda de la inmobiliaria Martinsa-Fadesa, actualmente en concurso de acreedores, se eleva a 7.155,9 millones de euros, en tanto que el valor de sus activos asciende a 7.336,9 millones, según el informe concursal presentado hoy por los administradores en un juzgado de A Coruña.
La deuda supera en 1.495 millones de euros a la declarada por la compañía al cierre del tercer trimestre, en tanto que el valor de sus activos, según las tasaciones de tres sociedades diferentes, es inferior -2.637 millones menos- al contabilizado a 31 de septiembre.
Según un comunicado del Tribunal Superior de Justicia de Galicia, el informe de la administración concursal presentado hoy detalla que el patrimonio neto asciende a 181 millones de euros, frente a los 1.527 millones que publicó la compañía en sus cuentas relativas al tercer trimestre.
Los administradores del concurso de acreedores de Martinsa-Fadesa, Antonio Moreno Rodríguez (por parte de Bankinter), Antonia Magdaleno (como abogada administradora) y Ángel Martín Torres (en nombre de la consultora KPMG), presentaron esta mañana en el Registro del Juzgado de lo Mercantil de A Coruña este informe, que recoge su situación patrimonial y la relación de sus acreedores.
Los administradores consideraron «posible» un marco de negociación adecuado para elaborar un convenio de acreedores, que podría ser presentado en cualquier momento.
El informe señala que el total de deudas las ordinarias de la inmobiliaria que preside Fernando Martín, incluida la de las entidades que financiaron la opa de adquisición de Fadesa, es de 4.361,7 millones de euros.
En lo que se refiere a las deudas hipotecarias con garantía prendaria, el importe adeudado es de 1.827,6 millones de euros; 7,8 millones corresponden a las contraídas con entidades públicas, y 542,7 a deudas subordinadas, principalmente con empresas del grupo.
Desde que se nombró la administración concursal de Martinsa, sus tres miembros han estudiado todas las operaciones realizadas por la sociedad en los dos años anteriores a su declaración en concurso y determinado cuáles han podido ocasionar daños a la masa del concurso para que se puedan reintegrar, es decir, que queden sin efecto.
Entre estas operaciones, la administración habría podido estudiar la compra de Fadesa por parte de Martinsa, ya que se llevó a cabo en los últimos dos años.
Una vez presentado este informe, se discutirán juicio a juicio cada uno de los incidentes que aparezcan en el citado informe, con el objetivo de elaborar uno definitivo, en un plazo que superará los cinco meses, ya que dependerá del número de casos que se discutan.
El procedimiento establece que un mes después de que se presente el informe definitivo se convocará una junta de acreedores que se celebrará 2 o 3 meses después.
