La estafa siempre gira entorno a que el dueño tiene que viajar al extranjero por motivos de trabajo y asegura ser el único que tiene llaves de la casa
Marina, licenciada en Publicidad, decidió irse con su novio a vivir una temporada a Escocia a estudiar inglés y se puso a buscar piso en Glasgow a través de Idealista, Fotocasa y Segunda Mano.
Tras rebuscar entre cientos de ofertas, encontró un anuncio de un apartamento precioso. El barrio era bueno, así que escribió al dueño al correo electrónico que figuraba como contacto.
«Me contestó enseguida. El alquiler que pedía era inferior al resto de ofertas que tenía como alternativa en favoritos. Incluía todos los gastos, así como Internet. Hasta permitía fumadores y mascotas. Vamos, un chollo.»
Por la tarde, le contó ilusionada el hallazgo a su novio, y se sentaron juntos frente a la pantalla del ordenador para recrearse en las fotografías del piso. Pero cuando entró de nuevo en la página web en la que había visto el anuncio, ya no estaba.
«Volví a escribir un email al dueño pidiéndole que nos enviara fotos y preguntándole por qué había retirado el anuncio.
Nos contestó que lo había retirado porque nosotros éramos la pareja a la que quería alquilar su piso.
El alquiler era tan barato porque se tenía que ir unos meses a un país africano y buscaba unos inquilinos que cuidaran su casa mientras él estaba fuera.
Nos decía que éramos perfectos para vivir allí mientras él estaba fuera con su familia.
Nos decía que las llaves las tenía él, pero que ya se encontraba en el extranjero. Teníamos que ingresarle una fianza en un número de cuenta y él nos enviaría las llaves por mensajería donde quisiéramos.»
REACCIONAR A TIEMPO
- «Se lo conté a una amiga que también se iba a cambiar de piso. Me dijo que ella, al contactar con el dueño de un piso en alquiler, había recibido una respuesta idéntica a la nuestra. Sólo que esta vez en un apartamento de Salamanca. Pero es que también le pasó lo mismo con un piso en Madrid.»
- «Probamos pidiendo información de este tipo de pisos, baratos y como de tienda de decoración, en Madrid y nos ocurrió algo similar»
La estafa siempre gira entorno a que el dueño tiene que viajar al extranjero por motivos de trabajo y asegura ser el único que tiene llaves de la casa. Todos piden un ingreso previo de la fianza pero las llaves nunca llegan… y el piso en realidad no existe.
La web de alquiler Segundamano.es ha alertado sobre los intentos de estafa y ha advertido que el portal es solamente un punto de encuentro de compradores y vendedores, de forma que no interviene en las transacciones ni son responsables de las operaciones que éstos realicen. Ofrece una Guía de Seguridad para que los usuarios que quieren alquiler o comprar un piso reconozcan las estafas inmobiliarias.
Asimismo, Idealista.com también cuenta con un apartado dedicado a prácticas dudosas en las que se pueden consultar las irregularidades más habituales en el alquiler de piso y que ayuda al usuario a orientarse a la hora de adquirir un inmueble.
Tucasa.com aconseja no enviar dinero a través de Western Unión, MoneyGram, Bidpay u otros servicios de pago similares.
Marina sigue buscando piso en Glasgow:
«Menos mal que nos dimos cuenta. A veces me imagino con la maleta buscando un piso fantasma en el extranjero. Pero está claro: nadie da los duros a pesetas»
Pero basta hacer una búsqueda en Google por «timo de alquiler en piso» para encontrarse decenas de relatos de personas que sí pagaron la fianza y perdieron el dinero.
Y muchas de ellas en ciudades como Madrid, Valladolid, Salamanca o Barcelona.