El oro es la inversión por autonomasia donde se refugian los ahorradores cuando las cosas se ponen feas en los mercados de deuda y renta variable.
Sin embargo en los últimos meses el metal ha perdido fuelle y los inversores han optado por otros activos dejando de lado las preciadas onzas.
La debilidad del euro frente al dólar ha provocado que el oro haya descendido desde cotas nunca vistas y ahora se sitúa en el entorno de los 1.600 dólares.
Llegados a este punto y con unos compradores potenciales como China, México, Kazajistán, Filipinas y Ucrania parece que las perspectivas pintan de otro color.
Los expertos consideran que las compras llevadas a cabo por los bancos centrales de estos países, así como por el siempre potente gigante chino, garantizarán una seguridad a largo plazo a la hora de invertir en el metal precioso.
Según las últimas cifras del Fondo Monetario Internacional (FMI), México, Kazajistán y Ucrania fueron compradores activos en el mercado del oro en el mes de abril, mientras que el banco central de Filipinas aumentó sus reservas en más de un millón de onzas en marzo. Este fue el decimoséptimo mes consecutivo en que el banco filipino sumaba más de un millón de onzas a sus reservas oficiales.
Mientras, el banco central de México compró 94.000 onzas, elevando sus reservas oficiales a poco más de 4 millones de onzas.
Por su parte, Kazajistán sumó 65.000 onzas a sus reservas, las cuales se ubicaban a finales de abril en 3,16 millones de onzas. Las reservas de Ucrania se incrementaron en 45.000 onzas hasta las 984.000.
Los analistas de IG Markets aseguran que recientemente el 83% de sus clientes tienen posiciones largas en oro, lo que indica que están preparados para lidiar con la volatilidad anticipándose a una aceleración de la demanda.
«El metal precioso ha sido una sólida apuesta de largo plazo y regularmente se ha recurrido a él en tiempos de crisis económicas. No hay razones que sugieran que esto debería cambiar drásticamente dados los fuertes fundamentos de una oferta ajustada y una fuerte demanda de países como India y China», asegura el estratega de mercado Justin Harper