Mientras que aún se debate si el sector inmobiliario comienza ya o no a repuntar, aunque sin llegar a las locuras del pasado y que conllevaron los problemas de los que se intenta aún salir, algunos ya han detectado que las familias numerosas tienen un enorme potencial de reactivar la demanda, ya que serán en los próximos dos años las más activas en la búsqueda de mayor espacio en el que vivir. Según datos oficiales del INE, este tipo de unidades familiares supera el medio millón en España y si no se atreven a cambiar de vivienda es por el mayor coste que tienen las de mayor tamaño. Pero siempre hay alternativas más económicas.
Los bancos se muestran cada vez más abiertos a la concesión de crédito, aunque algunos de ellos no confíen mucho en la dinamización de la demanda de hipotecas y se centren más en los préstamos para empresas. Pero por otro lado, también tratan de soltar el stock de inmuebles acumulados en sus balances con la mayor rapidez posible, algo que también tratan las inmobiliarias que se mantienen en pie.
Una luz de esperanza parece haberse encendido para todos ellos de cara a los dos próximos años. Si un buen número de familias se muestran algo más que reticentes en endeudarse de nuevo o por primera vez por el ladrillo, ante unas condiciones que no son ni serán las que los bancos ofrecían antes del pinchazo de la burbuja, hay una parte de la población que necesita mejorar o ampliar las condiciones actuales de habitabilidad.
Se trata de las consideras familias numerosas, necesitadas de viviendas con más metros cuadrados y que se han detectado como uno de los colectivos con mayor intención de comprar una vivienda en los próximos 24 meses, según un informe elaborado por el portal financiero Casaktua en colaboración con nPeople.
En la actualidad, en España hay 530.000 familias numerosas acreditadas, según el Instituto Nacional de Estadística. El perfil de este tipo de familias es el que está formada por una pareja de 43 años de media, mayoritariamente casada (90%), con tres hijos (69%) y que vive en un piso de tamaño medio (entre 90 y 140 metros cuadrados) con hipoteca en el 67% de los casos, según los datos que maneja la Federación Española de Familias Numerosas.
CUANDO EL TAMAÑO IMPORTA
Las viviendas de mayor tamaño, como es lógico, son más costosas que aquellas con unas dimensiones más reducidas, con independencia de que se traten de inmuebles nuevos o pisos de segunda mano. Bien es cierto, que el precio oscila de manera muy significativa entre Comunidades Autónomas, con la valenciana con un coste medio menor (83.000 euros) y las Islas Baleares con las viviendas más caras (en una media de 226.000 euros).
Ante el potencial de las familias numerosas, el portal inmobiliario Casaktua acaba de lanzar una campaña con más de 1.500 inmuebles de tres o más dormitorios con un precio desde 30.000 euros, tanto de obra nueva como de segunda mano, y con un tamaño medio de 113 metros cuadrados.
Aunque estas viviendas estás repartidas por toda España, el mayor número de inmuebles se concentran en Cataluña (348), Andalucía (230), Islas Baleares (211), Murcia (195) y Comunidad Valenciana (161). La inmobiliaria también ofrece a los potenciales compradores un centro de financiación para la adquisición de su futura vivienda.
