as pérdidas provocadas por el fenómeno de la sequía y la falta de agua en el sector de la agricultura durante este año se situarán entre 3.000 y 4.500 millones de euros, según los datos que ha podido recopilar este periódico entre organizaciones agrarias como la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (Asaja) y otras de carácter sectorial.
El resultado final dependerá de lo que pueda suceder en los próximos meses hasta que acabe el ejercicio y del balance final en el sector del olivar para molino, campaña que está comenzando en la actualidad.
Los sectores más afectados por la sequía han sido el de los cereales, especialmente en Castilla y León; el viñedo, con un recorte importante en la producción y el olivar, tanto en el caso de la aceituna de verdeo como en la de molino.
El valor de la rama vegetal de la Producción Final Agraria en España en 2016 ascendió a 28.752 millones de euros, que se obtiene como el resultado de multiplicar la producción por su valor en base a los llamados precios constatados.
En el caso de los cereales, el valor de la producción final el año pasado fue de 3.824 millones de euros.
Explica César Lumbreras en ‘La Razón’ este 16 de octubre de 2017 que, si se tiene en cuenta que con la cosecha estimada (todavía no hay datos definitivos) se va a reducir en un 34% por lo menos y que no está habiendo una subida de precios debido a las importaciones, las pérdidas en relación con el año pasado ascenderán a 1.300 millones de euros por lo bajo.
El vino, también afectado
En el vino, el valor de la producción fue de 1.096 millones de euros y la producción ascendió a casi 44 millones de hectolitros. Este año, según las últimas estimaciones, se situará entre 35 y 37 millones de hectolitros, según estas mismas fuentes, lo que supone una caída del 18-20%.
El valor de este producto agrario el año pasado fue de 1.096 millones, lo que da una posible pérdida de 200 millones.
En este caso, y debido a las malas cosechas de uva en países como Francia e Italia, podría registrarse un incremento en los precios que compense en parte el recorte de la producción.
En aceite de oliva se anuncia una producción de 1,15 millones de toneladas, con una caída del 10%. Sin embargo, y de acuerdo con las últimas previsiones que han llegado de las provincias andaluzas de Jaén y Córdoba, principales zonas productoras, podría registrarse una caída del 20-30% en relación con las cifras del año pasado, que ya fueron bajas, por lo que será muy difícil que se alcance la cifra citada anteriormente.
Según la organización agraria Asaja, la producción final podría situarse en 1 millón de toneladas, frente al récord de 1,8 millones logrados hace unos pocos años. Actualmente, se considera que una producción normal oscila entre 1,4 y 1,5 millones de toneladas.
El valor de la producción el año pasado fue de 2.890 millones de euros y se estima que la de este año podría bajar en torno a 300 y 500 millones de euros aproximadamente, dependiendo de la evolución de los precios y de la cosecha final obtenida. En otros sectores también se han registrado pérdidas, que se suman a las anteriores.
