Un joven de 18 años natural de Alagón (Zaragoza) ha protagonizado una alocada huida tras robar una furgoneta que pudo haber acabado en tragedia.
El individuo emprendió una temeraria ruta por carretera bajo los efectos de sustancias no permitidas y pese a no tener carné de conducir. Horas después terminaba siendo detenido por la Guardia Civil, tras haber creado el pánico en la N-232 y haber movilizado tras él a varias dotaciones de la Benemérita.
Cuando fue detenido tuvo que ser trasladado al hospital, debido al desastroso estado mental que presentaba por la ingesta de drogas. Estaba fuera de sí, muy excitado y con un cuadro de agresividad, paranoia y alucinaciones, según han informado fuentes de Tráfico.
Los hechos ocurrieron el domingo 28 de octubre, pero ha sido ahora cuando los ha hecho públicos la Guardia Civil. Aquel día, la alarma saltó cuando varios conductores se cruzaron con el vehículo que conducía este joven por la N-232 a la altura de Calahorra (La Rioja). Avisaron de que habían visto una furgoneta que circulaba de forma muy extraña, realizando maniobras antirreglamentarias y poniendo en peligro su vida y la de los demás.
Según recoge ABC varias dotaciones de la Guardia Civil de Tráfico salieron a su búsqueda, localizando y dando alcance a la furgoneta, pero, pese a sus insistentes señales para que parara el joven continuaba con una alocada fuga por carretera y por caminos. Llegó a chocar contra un vehículo y varios conductores tuvieron que salirse de la carretera para esquivar el impacto.
Al final, el joven intentó huir por un camino de tierra, por el que circuló durante un kilómetro, hasta que perdió el control empotrándose contra un talud. En ese momento abandonó el vehículo y emprendió la huida a pie, pero fue interceptado por la Guardia Civil.
Una vez en dependencias policiales, los agentes comprobaron que el joven no tenía permiso de conducir y que la furgoneta la robó en la también riojana localidad de Alfaro. En una primera prueba de detección de drogas se desveló que había consumido cannabis, anfetaminas y metanfetaminas. Presentaba un severo cuadro de excitación, agresividad, paranoia y alucinaciones, por lo que fue trasladado de urgencia al Hospital Provincial de Logroño.
Tras recibir el alta hospitalaria, quedó en libertad a la espera de juicio. Se le imputan tres delitos contra la seguridad vial y otro de hurto de vehículo.
