El futbolista brasileño Neymar quiso desplegar todo su arsenal de malabares en un partido de exhibición de fútbol 5 organizado por su fundación, pero los movimientos no le salieron y un joven defensa le robó el balón.
Ante el robo, el famoso astro del París Saint Germain reaccionó de una manera brusca: persiguió por la banda a su rival, un jugador juvenil mexicano, y le propinó una dura patada que lo dejó en el suelo.