En Argentina, un hincha del Boca Juniors de 17 años se fue a un estudio para hacerse un tatuaje del escudo de su equipo. Una vez que el joven les mostró el dibujo que quería llevar en su espalda, los dos tatuadores se dedicaron de lleno al trabajo, que les llevó bastante tiempo y dejó muy dolorida a la víctima.
Al llegar a casa, el joven mostró muy orgulloso la espalda a su madre y la mujer comprobó escandalizada que nada tenía que ver con el escudo del Boca, sino que se trataba de un pene y dos testículos de gran tamaño.
El caso fue denunciado por la madre del chico, quien dijo que la víctima de la broma pesada, que padece un retraso mental, sufrió fuertes dolores en la espalda a raíz del tatuaje.
No existen, prácticamente, antecedentes sobre hechos de estas características, por lo que habrá que consultar con distintas jurisprudencias y establecer el tipo de delito. De momento, el estudio fue cerrado y los jóvenes, que tenían antecedentes penales y al parecer aprendieron su oficio en la cárcel, fueron detenidos.
La jueza encargada del caso estudia imputarles también la presunta comisión de los delitos de «Daño» y «Lesiones graves» a medida que avance la investigación.
