Nunca había pisado un teatro de ópera en su vida y de pronto se ha convertido en estrella de uno de los cosos operísticos más importantes del mundo, la Royal Opera House de Londres, y sin abrir la boca. De día, Duncan Meadows hace de estatua inmóvil en las calles del turístico Covent Garden, disfrazado de centurión romano. Por la noche, atraviesa la plaza para salir en el escenario como verdugo de San Juan Bautista en “Salomé”, de Richard Strauss.
Meadows lleva cinco años de artista callejero, según cuenta el corresponsal de ABC en Londres, Emili J. Blasco. Corpulento y de fornidos músculos, que la faldilla de centurión deja bien al decubierto, el joven pensó incluso que se trataba de un solicitud de cita sexual cuando alguien acudió de emisario para hacerle una propuesta. Había sido el propio director artístico de “Salomé”, David McVicar, quien preparando esta ópera se había fijado en él al pasar cada día por su lado. Cuando la seriedad del asunto estuvo aclarada, Meadows se lo tuvo que pensar todavía un momento: se le requería que apareciera desnudo durante el tiempo que corta la cabeza de San Juan y se la entrega a la instigadora del crimen.
En realidad, el principal problema para Meadows no ha radicado en eso, sino en el dinero que deja de ganar mientras trabaja en la “alta cultura”. En la calle obtiene unos 530 euros al día cuando las cosas van muy bien, mientras que por sus bolos en la Royal Opera House percibe sólo unos 400 a la semana.
“Lo vi ahí fuera -afirma McVicar- y de inmediato pensé que tenía el perfecto cuerpo para el papel. Pero también tiene la habilidad de moverse bien y, lo que es particularmente importante, de estar de pie sin moverse, pues el papel requiere que el verdugo permanezca quieto la mayor parte del tiempo entre el grupo el coro y el grupo de cantantes”.
Los turistas siguen acercándose a Meadows para hacerse fotos mientras como centurión pintado de color plata les pone al cuello la espada de plástico que lleva en la mano. ¡Si supieran que es un verdugo que se cubre el cuerpo de sangre se andarían con más cuidado!
