(PD).- La princesa heredera Victoria de Suecia contraerá matrimonio a principios de verano de 2010 con el empresario Daniel Westling, según ha anunciado hoy la Casa Real sueca.
La noticia se ha hecho pública tras celebrarse un Consejo de Estado en el Palacio de Estocolmo, en el que han participado el rey Carlos Gustavo, la reina Silvia, el primer ministro Fredrik Reinfeldt, representantes del gobierno y la princesa, que según establece la Constitución sueca debe pedir autorización para casarse.
La prensa sensacionalista ha especulado con el enlace en incontables ocasiones desde 2004.Incluso en 2006, la Casa Real sueca explicó, ante los insistentes rumores, que la boda no se celebraría ese año para no coincidir con el 60 aniversario del nacimiento de su padre, el rey Carlos Gustavo, un evento al que asistieron muchos miembros de la realeza europea.
El motivo de que la pareja se dé un plazo de más de un año hasta el enlace deriva de las obras de remodelación que deberán hacersre en la residencia real para acoger las nupcias.
Única heredera soltera
Victoria, de 31 años, es la primogénita del rey Carlos Gustavo de Suecia y de su mujer, la reina Silvia, seguida por la princesa Magdalena y el príncipe Carlos Felipe. Es la única heredera de una casa real europea que permanece soltera, por lo que su relación de más de seis años con Daniel Westling ha acaparado el interés de los medios de comunicación internacionales.
El prometido de la princesa, de 35 años, es entrenador personal y el principal propietario de una exclusiva cadena de gimnasios repartidos por Estocolmo, Balance Training, a la que acude lo más selecto del mundo empresarial sueco y parte de la familia real. Precisamente, la pareja se conoció en uno de sus gimnasios, en 2001.
Al comenzar el noviazgo, el joven fue muy criticado entre otras razones por su vestimenta informal, pero con el tiempo Westling cambió las gorras y pantalones vaqueros por el traje y la corbata, adquiriendo un estilo más yuppie.
La princesa ha salido en su defensa varias veces. De hecho, durante una entrevista que concedió en 2003, Victoria insistió en lo difícil que resulta entrar a formar parte de una familia real cuando se viene de fuera, y recordó el caso de su madre, la reina Silvia, una plebeya de origen alemán.
Aunque en un principio el monarca Carlos Gustavo no se mostró muy partidario del pretendiente, el romance terminó por consolidarse. Incluso el año pasado la pareja se fue a vivir a una casa contigua al palacio real de Drottningholm, cerca de Estocolmo.