Las vacaciones que se tomó en México con Aniston tenían segunda parte en los carnavales de Río de Janeiro y era con Nicole Scherzinger, una de las integrantes de las Pussycat Dolls
Vaya, vaya con Gerard Butler. Cuando pensábamos que algo se traía con Jennifer Aniston se lo ha montado nada menos que con Nicole Scherzinger, la ex de Lewis Hamilton. Es verdad que la chica de Friends se había esmerado en decir que eran amigos pero ¿quién no albergaba la esperanza de ver una nueva parejita feliz?
«Atrae a las mujeres como el polen a las abejas»
Es la frase con la que el diario The Sun da la noticia y no puedo estar más de acuerdo. Las vacaciones que se tomó en México con Aniston tenían segunda parte en los carnavales de Río de Janeiro y era con Nicole Scherzinger, la morenaza de las Pussycat Dolls y que estrenó soltería en el Sambódromo.
Una belleza de mujer.
EL ENEMIGO EN CASA
Katie Holmes no puede más. La familia de Tom Cruise está muy unida, tanto que la pobre Katie, además de aguantar a su marido que debe ser tela, tiene que aguantarse a la suegra, cuñada y descendientes. ¿Puede haber algo peor?
En la casa de los Cruise viven, además de la pareja y su hija Suri, los otros hijos del actor, su madre, su hermana y sus tres sobrinos.
Así recoge la noticia el portal Showbizspy. Katie ha decidido poner unas normas: la familia podrá ir a la casa previo aviso y siempre que no se queden a dormir.
LA MUJER DE CHARLIE SHEEN ES ADICTA AL CRACK
Otros que han tenido problemas recientemente son el actor Charlie Sheen y su mujer. Hace unos meses, el fue detenido por amenazar a su mujer con un cuchillo. Ahora una triste noticia echa más leña al fuego, la de la adicción a las drogas de Brooke Mueller.
El asunto ha saltado a la luz porque la noche en que él fue detenido, Brooke había consumido mucho alcohol y crack. Ahora ha decidido empezar un tratamiento de rehabilitación, según informa la revista People.
RIHANNA MALA PÉCORA
La cantante cree que proyecta una imagen de persona borde y desagradable porque es tímida cuando le presentan a alguien.
Aunque Rihanna admite que es bastante reservada a la hora de entablar conversación, se defiende afirmando que no tiene por qué ser especialmente simpática con alguien que acaba de conocer.
Así lo ha explicado en la revista WPGC:
«Si no conozco a alguien no suelo decir gran cosa, me limito a observar, y la gente piensa que soy una estirada sólo por eso, asumen que soy una mala pécora»
«No soy lo que ellos creen. Simplemente no tengo por qué mostrar tanto entusiasmo si ni siquiera te conozco bien»
