Pastora Vega intenta que su noviazgo con el actor Juan Ribó se vea con toda normalidad. Recuerda que la ruptura con Imanol Arias fue «algo positivo, bien hecho y de forma «civilizada» y confía en que su actual relación, que reconoce es «compleja» deje de ser noticia para convertirse en algo cotidiano.
Sin lugar a duda, Pastora y Juan son la pareja del momento ya que estábamos acostumbrados a ver a la actriz sumida en una de las relaciones más sólidas y discretas de nuestro panorama, y de repente el amor se marchó a otro actor.
Juan Ribó es considerado como un actor de teatro clásico por sus representaciones. Pastora, por el contrario, es más conocida por su carrera cinematográfica y televisiva. Dos trayectorias diferentes pero a la vez igual de intensas que han desembocado ahora en una historia de amor de ficción pero real al mismo tiempo.
Y es que Una relación pornográfica ha despertado todo tipo de morbo. Él no ha experimentado nunca actuar con en el mismo escenario que su pareja, en cambio, Pastora con Imanol ya sabe lo que es y asegura que «utilizas esa situación a tu favor, al menos, sabes cómo transformarla para que te ayude a estar en el estado necesario para salir al escenario…» ha declarado a la revista Vogue.
Pero, pese a tener todas las miradas puestas en ellos día y noche, han decidido seguir adelante sin mirar atrás. «Es la hora de vivir esto con normalidad, que no nos perturbe», dice Pastora que reconoce qeu su caso es más complejo tras la sonada ruptura con Imanol.
LA «RUPTURA NACIONAL»
Se ha hablado mucho sobre su ruptura con Imanol Arias –hasta el punto de que Vega la califica de «la ruptura nacional»– pero asegura que no ha sido un trauma como muchos piensan: «Siempre parece que ruptura es igual a algo negativo, a fracaso. En este caso ha sido algo positivo, bien hecho, con respeto y con cariño, una cosa civilizada».
La actriz no entiende porque la gente no se alegra de su felicidad y en cambio no paren de «ensuciarlo todo y buscarle tres pies al gato…». «Pensé que en algún momento ese pico iba a empezar a bajar, pero veo que no», lamenta.
Su chico le defiende reafirmando: «las separaciones están a la orden del día. Y aquí en España, hemos visto cosas extraordinarias: una infanta que se separa…? ¿Por qué delimitar la libertad de una pareja? ¿Por el hecho el hecho de que sea icónica no pueden vivir su momento y su vida como quieran?».