Ni reunión, ni acercamiento, ni lágrimas

El reencuentro entre Tita Cervera y su hijo, una mentira

El reencuentro entre Tita Cervera y su hijo, una mentira
Blanca, Tita Cervera y Borja Thyssen. EP

ras un año de duros enfrentamientos, Tita Cervera y Borja volvían a verse las caras en un hotel de Madrid para intentar ponerse de acuerdo en el reparto de la herencia del Barón Thyssen. En un breve encuentro, madre e hijo no consiguieron acercar posturas y la reunión terminaba con una baronesa llorando a la salida. Ahora, todas estas afirmaciones han sido desmentidas. Al parecer, no hubo ni reunión, ni acercamiento, ni lágrimas.

Una revista nos sorprendía este fin de semana con este titular: «Encuentro con Borja. Los peores cinco minutos de la baronesa Thyssen. Acabó destrozada y entre lágrimas». Después de los últimos meses en los que Tita ha mantenido un distanciamiento con su hijo, ocurrió el encuentro.

La cita fue en un hotel y, según la publicación, duró escasos minutos. La cosa empezaba mal porque la baronesa había exigido que Blanca no asistiera al encuentro, así que Borja llegó solo. Una vez allí, madre e hijo se saludaron con frialdad y ni siquiera se dieron dos besos. La conversación empezó con reproches, subió de tono y finalmente Tita Cervera abandonó el hotel entre lágrimas.

Ahora, Anthony Toffoli, padrino de Sacha, el hijo de Borja y Blanca, ha desmentido rotundamente la reunión entre la baronesa y su hijo: «Es una serie de mentiras total y absoluta». Y añadió: «Es un tema privado. Si se han visto o no es un tema que les pertenece solo a ellos dos, no tiene por qué exponerse de forma pública y a mí no me consta que se hayan visto».

«Estupenda, guapísima y cada día mejor. Le tengo mucha admiración y seguro que Borja también porque es una súper madre y se comporta como una campeona», concluyó el joven elogiando como siempre a Carmen Cervera.

LA BARONESA TAMBIÉN HABLA

Por su parte, la baronesa presentaba este lunes una colección de pinturas impresionistas en el museo Thyssen. Carmen asistía a la inauguración de una muestra de 130 obras que recorre casi un siglo de la creación impresionista con la naturaleza como eje temático.

Allí Tita ha augurado que las relaciones con su hijo Borja se solucionarán, pero no ha querido confirmar si se había producido la reunión, tal y como apuntaban los rumores, aunque sí ha querido señalar que la situación tensa actual se solucionará pronto.

La baronesa tampoco quiso aclarar si la presencia de Blanca Cuesta, esposa de Borja, es la culpable de las malas relaciones entre madre e hijo.

 

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