El Estado podrá solicitar su vehículo para exponerlo, como patrimonio histórico
En un parque automovilístico como el español, que presenta una antigüedad media en máximos históricos, abundan los coches con más de dos décadas de antigüedad. Pero muchos de sus dueños no saben que pueden declarar estos automóviles como vehículos históricos y beneficiarse de un buen número de ventajas con ello, como explica El Economista. Ahora, eso sí, no les saldrá barato.
Entre los beneficios de poder convertir su coche particular en vehículo histórico se encuentran, por ejemplo, la ampliación de la periodicidad de uno a cinco años de la obligación de pasar la ITV, descuentos en el seguro o incluso la posible exención del impuesto de circulación, tal y como destaca el portal Consumer de Eroski, dedicado a la información de servicio para los consumidores.
Pero, ¿qué debe considerarse en un vehículo para que pueda ser declarado como histórico? Según el Real Decreto 1247/95 del 14 de julio que lo regula, un vehículo histórico son todos aquéllos que:
– Tengan una antigüedad mínima de 25 años desde su primera fabricación, sin que haya sufrido modificaciones.
– Estén incluidos en el Inventario General de Bienes Muebles del Patrimonio Histórico Español o hayan sido declarados bienes de interés cultural.
– Los denominados vehículos de colección que, por sus características, singularidad o escasez manifiesta, merezcan acogerse al régimen de vehículos históricos.
¿Cómo se gestiona la acreditación? El interesado deberá acudir a la Jefatura Provincial de la Dirección General de Tráfico (DGT), presentar la documentación requerida y abonar el importe de la correspondiente tasa: 92,80 euros para automóviles y 25,80 euros para motos.
Pero, al margen de las citadas ventajas de poseer un vehículo histórico (a las que se puede añadir el hecho de que no deban responder a nuevas legislaciones que atañen, por ejemplo, al control de emisiones contaminantes o de ruidos), esta conversión tiene también sus inconvenientes. En primer lugar, su alto coste, que en total puede ascender hasta los 600 euros; también las limitaciones en su uso, con prohibiciones como la de rodar en autopista y autovía si no supera los 60 km/h o de circular en condiciones climáticas adversas con visibilidad reducida.
Por otro lado, el vehículo será histórico para lo bueno… Y para lo malo: el Estado se reserva el derecho de solicitarlo para exposiciones y eventos debido a su condición de patrimonio histórico.
