La intervención ha durado tres horas y se ha hecho bajo anestesia general
El Rey permanecerá ingresado en la clínica madrileña La Milagrosa en torno a una semana y podrá estar completamente recuperado en un periodo de dos a seis meses.
El neurocirujano Manuel de la Torre ha explicado este 3 de marzo de 2013 que la operación ha requerido la «extirpación de dos segmentos» herniados de disco
El doctor De la Torre ha subrayado que, cuando complete su recuperación, Don Juan Carlos «no necesitará muletas».
El cirujano ha recalcado asimismo que el Rey «se está recuperando estupendamente bien», previsiblemente pasará este lunes a ocupar una habitación de la clínica y, después de abandonar el centro médico, continuará su rehabilitación en el Palacio de la Zarzuela.
El neurocirujano ha añadido que la predisposición de Don Juan Carlos es muy positiva.
«Sus comentarios son de optimismo y fuerza».
También ha alabado su comportamiento como paciente:
«Es difícil encontrar uno de mejor calidad humana y de trato».
VISITAS
El príncipe Felipe, que ha acudido a visitar a su padre junto a doña Letizia, ha declarado a su salida de la clínica La Milagrosa:
«El equipo médico ha hecho un trabajo magnífico. Ya está despierto, hemos intercambiado unas palabras para que supiera que estábamos aquí. Ahora le espera una época de trabajo duro y esfuerzo para recuperarse».
Es la cuarta vez que el Monarca, de 75 años, pasa por el quirófano -o como a él le gusta llamarlo, «el taller»– en apenas diez meses; la séptima desde mayo de 2010 y la número 12 en toda su vida. La baja será más larga que tras la última operación de cadera, cuando don Juan Carlos suspendió su agenda oficial durante un mes.
Al filo de las dos de la tarde del domingo, han llegado a la clínica la Reina, las infantas Elena y Cristina y el secretario de estas, Carlos García Revenga, que el pasado sábado declaró ante el juez Castro como imputado en el caso Nóos.
Un grupo de señoras que esperaba en la puerta de La Milagrosa ha irrumpido en aplausos en cuanto ha visto bajarse del coche a doña Sofía y sus hijas. Para entonces, el Rey ya estaba en el quirófano.