Según el grupo en el mundo se han vendido 23 millones de estos modelos
La corporación multinacional IKEA ha dado la voz de alarma al anunciar que un niño de corta edad murió recientemente ahogado, mientras jugaba en su cuna con el cable de una lámpara de pared de la conocida serie ‘SMILA’.
Otro niño, de menos de un año, estuvo a punto de correr el mismo destino, pero fue salvado, informa ‘RIA Novosti‘. Sin embargo, la compañía no especifica cuándo y dónde ocurrieron estos incidentes.
Después de la muerte del menor IKEA ha pedido a sus clientes que dejen de utilizar estas lámparas, o que en todo caso acudan a la tienda de la cadena más cercana para obtener un conjunto de herramientas gratuitas para fijar el cable a la pared.
IKEA empezó a vender las lámparas de pared de la serie SMILA en 1999. Según el grupo en el mundo se han vendido 23 millones de estas lámparas.