El general la dio a conocer en el discurso de despedida como director de la Academia General Militar de Zaragoza

La receta secreta de Franco para acabar con unas ladillas de espanto o algo peor

Pretendía evitar las enfermedades de transmisión sexual entre los cadetes

La receta secreta de Franco para acabar con unas ladillas de espanto o algo peor
El general Francisco Franco. EP

"Las enfermedades venéreas, que un día aprisionaron, rebajándolas, a nuestras juventudes, no hicieron su aparición en este cuerpo"

El general Franco presumió, en el discurso de despedida como director de la Academia General Militar de Zaragoza, haber erradicado las enfermedades de transmisión sexual durante su mandato.

El la charla, llevada a cabo el 14 de junio de 1931, se despedía de la última promoción y cumplía con la orden de Miguel Azaña del cierre del centro, según recoge ‘ABC‘.

Como director de la Academia dejó claro que se había marcado un objetivo: el sexo seguro y la prevención en las prácticas. «Las enfermedades venéreas, que un día aprisionaron, rebajándolas, a nuestras juventudes, no hicieron su aparición en este cuerpo», afirmó Franco.

UNA SENCILLA FÓRMULA

La fórmula con la que se habían evitado las enfermedades de transmisión sexual entre los cadetes, según el caudillo, era sencilla: «Por la acción vigilante y la adecuada profilaxis».

Durante su cargo en la Academia tuvo otras misiones, entre las que destaca la eliminación de las novatadas, ya que sufrió de ellas cuando entró como cadete en Toledo. Las calificó en su discurso de despedida como un «antiguo vicio de academias y cuarteles».

Además, un dato bastante curioso, es que en el mitin se jactó de haber formado cadetes con cuerpos atléticos, lejos del aspecto «sietemesino». Lo cierto es que Franco no se caracterizó en vida por su portento físico, si no más bien por todo lo contrario.

 

 

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