El anciano, cuya familia achaca el suceso a "un milagro", no se fía ya ni de su sombra...
Los empleados de la funeraria ‘Porter and Sons Funeral Home’ aún no se han repuesto del susto. Y no es para menos: de repente uno de los cadáveres que iban a embalsamar empezó a patalear dentro de una de las bolsas de plástico de rigor, y todos salieron de estampida.
Sucedió este miércoles 26 de febrero de 2014 en esta morgue situada en Mississippi, EEUU, donde Walter Williams de 78 años de edad, había sido llevado después de que sus familiares le encontrasen ‘muerto’, en lo que parecía ser un fulminante ataque al corazón.
SE LE HABÍA PARADO EL MARCAPASOS
Pero nada más lejos de la realidad. Al parecer lo que sucedió fue que el marcapasos de Walter dejó de funcionar y luego se ‘compuso’; pero para ese momento él ya estaba rodeado de otros difuntos.
Todos están felices, y achacan el suceso a «un milagro». El anciano, sea dicho de paso, no se fía ya ni de su sombra…