No les importa que la autopsia revelara en su día que el cámara italiano había tomado cocaína...
Lo suyo roza ya la obsesión más enfermiza. No les importa que la autopsia revelara en su día que el cámara italiano había tomado cocaína, ni que Raquel Sánchez Silva haya dejado constancia de los problemas que tenía Mario Biondo con esta droga que destroza personalidades, y que hace lo propio con las familias.
A ellos les da igual. Siguen cada día su particular calvario en su perfil de Facebook dando la paliza a costa de quien sea, y ahora se han pasado de la raya con tal de conseguir una exclusiva para una televisión italiana que vaya usted a saber qué les paga.
DE CABEZA A LA CASA DE RAQUEL
Y es que, según da cuenta ‘Vanitatis‘, los padres de Mario, Pipo y Santina, se han desplazado hasta Madrid acompañados por el mentado equipo para grabar un reportaje sobre la muerte de su hijo.
Sin embargo, sus ‘particulares’ investigaciones han ido demasiado lejos. Este miércoles por la tarde, Pipo, Santina y los periodistas italianos se desplazaron hasta el madrileño barrio de Oporto, donde actualmente vive Vilma Graciela, para intentar hablar con la persona que encontró el cuerpo de Mario Biondo.
LLAMADA A LA POLICÍA
La situación fue tan tensa que Vilma se vio obligada a telefonear a la policía que, según confirman fuentes del cuerpo a Vanitatis, recibió una llamada de la que fuera asistenta del matrimonio en la que declaraba que estaban intentando entrar en su casa.
A su llegada, la familia Biondo y la televisión italiana ya se habían marchado, por lo que Vilma decidió no poner una denuncia, pero sí declaró ante los agentes que la madre de Biondo, Santina, ante su negativa de no querer narrar ante la cámara cómo fue el momento en el que encontró el cuerpo de Biondo, puso el pie en la puerta para que no la cerrara.
A MOLESTAR AL INQUILINO
Sin embargo, esta no fue la única visita que realizaron los Biondo y la televisión italiana en Madrid. Sólo unas horas antes del incidente en casa de Vilma, se presentaron en el antiguo piso que compartían Raquel Sánchez Silva y Mario Biondo cerca de la plaza de Tirso de Molina y que la presentadora puso en alquiler el pasado mes de noviembre para mudarse a un piso en la calle Génova de Madrid, muy cerca de la sede del Partido Popular, huyendo del recuerdo.
A primera hora de la mañana, el nuevo inquilino recibió la visita de cuatro personas, quienes le pidieron que les dejase pasar a ver la casa. Sorprendido, les preguntó cuál era el motivo por el que estaban allí, ante lo que uno de ellos, una periodista, señaló a dos de sus acompañantes y dijo: «Estos son los padres de Mario Biondo». Ante esto, Santina tomó la palabra: «Esta fue la casa de mi hijo… por favor».
El periplo español de los Biondo ha continuado en las últimas horas, ya que en la mañana de este jueves 3 de abriel de 2014 han viajado hasta Plasencia, localidad cacereña en la que vive la familia de Raquel, para hablar con su madre, quien les ha visto en las inmediaciones de su vivienda….