Podría tratarse de una broma pesada, pero este vídeo forma parte de una campaña holandesa para prevenir los accidentes de tráfico producidos por los excesos de velocidad invita a los conductores a su propio funeral, literalmente.
UNA EXCUSA
Los protagonistas de la noticia acudían a la cita pensando que iban a reunirse con un amigo, aunque en realidad era una excusa para que asistiesen a su propio funeral, en el que sus familias y amigos decían unas palabras en su honor.
Con una sala abarrotada de personas conocidas y un ataúd, los protagonistas se sentaban entre todos ellos a ver y a escuchar, cómo sería su despedida si muriesen en un accidente de tráfico.