Ocurrió en la procesión de la Virgen de Consolación y Lágrimas de la Archicofradía de la Sangre, en Málaga.
Que si le virgen casi aplasta a un narazarerno, que si un coche aplasta a una procesión y, ahora, como ‘broche de oro’, este nazareno borracho perdido.
Ocurrió en la procesión de la Virgen de Consolación y Lágrimas de la Archicofradía de la Sangre, en Málaga.
PEINETA INCLUIDA
El nazareno no solo va haciendo eses durante el recorrido con el peligro añadido del cirio encendido en la mano, sino que cuando le llaman la atención, le hace una peineta nada religiosa al campanillero.