Concha Moncada de Valdés: "Os pido que me ayudéis y no me dejéis sola en esta lucha"

La triste historia de una millonaria del Barrio de Salamanca a la que ha incapacitado su sobrina

"Los análisis médicos dicen que no tengo ni Demencia Senil ni Alzheimer"

Es una historia con un trasfondo de dinero y quizás codicia, quién sabe, de la que se hace eco con tino el periodista Alberto Espinosa desde ‘ABC’, y que inquieta sobremanera a todos los que quieren a Concha Moncada de Valdés, una encantadora millonaria que vive en el madrileño Barrio de Salamanca y que corre el riesgo de acabar internada en un asilo vistas las circunstancias.

Tras lanzar un angustioso mail a todos sus conocidos:

«Os pido que me ayudéis y no me dejéis sola con esta lucha»,

esta conocida señora da cuenta de que una sobrina, Sofía Arana, ha logrado que la declaren incapaz, y con ello ser la heredera y administradora del cuantioso patrimonio que posee.

DOS VÍDEOS

Dos vídeos colgados por la misma Concha en su propio canal de YouTube alertan de los hechos, a la vez que ilustran la incómoda y angustiosa situación en la que se encuentra actualmente.

La sobrina tiene desde hace unos días la potestad de decidir sobre su tía, con la consecuencia que ello conlleva: el internamiento en una residencia de ancianos.

  Sofía Arana, es definida por la propia protagonista como alguien

«con la que no tengo relación y nos tenemos una antipatía mutua. Quiere, con la ayuda del Juzgado 65, administrar, sin tener ningún derecho, mi patrimonio y heredarme en el futuro».

Las imágenes son harto elocuentes y dan cuenta de la situación.

«ESTOY MUY SANA»

Concha, habitual del Barrio de Salamanca en la vida social y tertulias, estuvo casada con el prestigioso notario Virgilio de la Vega Benayas, quien falleció en julio del año 2008, quedándose así viuda y sin descendencia, pasando a ser administradora de todo el patrimonio. También es una lectora que devora los clásicos y una amante de los caballos, ya que de joven fue amazona.

Concha acaba su mail recalcando que «los análisis médicos dicen que no tengo ni Demencia Senil ni Alzheimer, pero hemos quitado de nuestra vida a Dios y de pronto se han erigido estos diosecillos que con toda impunidad nos quieren privar de nuestra libertad y de nuestra vida. Con todo cariño, Concha Moncada de Valdés».

 

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