Brian Robinson es un hombre que ha labrado su fama de mujeriego preguntando «¿de dónde eres?».
«Esa frase abre un número impresionante de puertas porque el 97% de las mujeres no son de aquí», afirma.
Y es que este neoyorquino se ha especializado en ligar en el metro de la ciudad estadounidense, -y que ha escrito un libro sobre ello- donde dice haber logrado salir con unas 500 mujeres.
«TONELADAS DE MUJERES»
Su andadura comenzó en 1999 y su suerte cree que se debe (en parte) a la probabilidad: «Hay toneladas de mujeres ahí abajo».
Aunque de genética también le viene la afición porque Robinson recuerda que a su tío Minor «le expulsaron de varios asilos de ancianos por pellizcar a las enfermeras»: «Fue un gran mujeriego», recuerda.
Este peculiar personaje de Nueva York parece tener clara la clave para que esto funcione: tener una conversación rápida donde quede claro que se tiene interés por la chica. Y, a continuación, utilizar los plazos del Metro para largarse: «Me encantaría continuar esta conversación pero tengo que bajarme en la siguiente parada. ¿Me das tu correo electrónico?».
El periódico «The New York Post» pudo comprobar cómo este hombre consiguió el contacto de cuatro de las cinco mujeres con las que conversó durante un rato en el Metro. ¿Genética del tío Minor o picardía labrada con los años?
