La modelo es la nueva imagen de Tex, la marca de ropa de Carrefour

Aída Artiles: «Cada vez me cuesta más llevar este ritmo de vida»

Aída Artiles: "Cada vez me cuesta más llevar este ritmo de vida"
Aída Artiles EUROPA PRESS

Con su hermana como ejemplo a seguir, la pequeña de las Artiles irrumpió en el mundo de la moda con diecisiete años y desde ese momento no ha dejado de trabajar. A sus veintiséis años, Aida Artiles ha recorrido medio mundo con su trabajo. Ahora, antes de volver a Nueva York para la temporada de verano, ha presentado la nueva campaña de Tex, la firma de ropa de Carrefour.

Las idas y venias y el estar lejos de su familia y de su tierra es algo que le empieza a pesar a la canaria, planteándose acabar con esa vida nómada en un par de años. Empieza a echar en falta una estabilidad y poder asentarse en una ciudad, una manera de poner fin a la distancia con la que vive su relación desde hace años con Joaquín, el cantante de Pol 3.14.

CHANCE ¿Qué es lo que más te gusta de la colección?

AIDA ARTILES: Me gusta que sea muy natural y muy fresquita, muy playera. Como soy isleña me veo reflejada, va muy acorde con mi estilo.

CH: ¿Cómo definirías tu estilo?

AA: Mi estilo es un poco surferillo, desenfadado y muy natural siempre. Siempre busco comodidad en cada prenda o look que elijo.

CH: Después de tantos viajes, ¿Cómo vives el volver a casa?

AA: Cada día que vuelvo a casa lo vivo como si fuese una niña pequeña el día de Reyes, es un regalo. Estoy deseando que el siguiente trabajo sea en las islas, allí aprovecho para ver a mi familia y a mis amigos. Lo valoro mucho.

CH: El buen tiempo también se agradece

AA: El buen tiempo ayuda mucho, soy una persona que si se levanta nublado tengo un carácter y si se levanta con sol me como el día. Me importa mucho el tiempo y se nota.

CH: ¿Qué proyectos tienes ahora?

AA: Me vuelvo a Nueva York para la temporada de verano, y más adelante me quiero encaminar más hacia la nutrición.

CH: ¿No ves tu futuro en la moda?

AA: No hay futuro, hay presente. Ahora mismo estoy trabajando en esto y es de lo que vivo, lo que me da la vida. Todo tiene un tiempo y me gustan muchas cosas, no me quiero cerrar a un camino.

CH: ¿Cómo llevas la vida nómada que caracteriza tanto a las modelos?

AA: La llevo bien porque llevo haciéndola desde que tenía diecisiete años y estoy acostumbrada. Ahora tengo veintiséis y cada vez me cuesta más llevar este ritmo de vida, coger maletas y dejar a mi familia lejos. Me cuesta mucho pero estoy acostumbrada, si me lo quitasen de golpe no me gustaría porque ya estoy hecha al cambio. Dentro de no mucho me gustaría establecerme en un sitio y estar más tranquila.

CH: ¿Dentro de no mucho?

AA: No sé cuándo porque nunca se sabe, pero quizá un par de años. Echo de menos tener una estabilidad, todo el mundo quiere tener una casa, una base. Disfruto pero la tierra me está tirando otra vez.

CH: ¿Te gustaría asentarte en España?

AA: No lo sé, seguramente necesitaría tener el mar cerca porque llevo muchos años lejos de él y cambia mucho. Ojalá pueda vivir en mi tierra pero nunca se sabe, aún soy muy joven y no sé cuál va a ser mi destino. Seguro que en un futuro lejano viviré en Canarias.

CH: Acabar en la moda, ¿Fue una vocación tuya o ver a tu hermana te influyó?

AA: No fue una decisión, no decidí hacerlo porque mi hermana estuviese ahí. Empecé como afición en Canarias, allí antes no había tanto trabajo y era muy recurrente hacer catálogos de niños o pequeños desfiles. Empecé muy pequeña y todo me vino rodado, cuando me hice algo más mayor me vine para Madrid y aquí se convirtió en trabajo. No lo decidí, me fue viniendo y lo fui haciendo.

CH: ¿Al empezar le pedías muchos consejos a tu hermana Ariadne?

AA: Más que pedir, lo iba viendo todo el rato. Cuando era pequeña mi hermana me llevaba de la mano a todos sitios, a trabajar y con sus amigos. Yo observaba y escuchaba, eso se me quedaba dentro y me ha ayudado mucho a llevar después mi propio camino. Ver lo que había, verlo desde fuera.

CH: ¿Conocías lo malo y lo bueno?

AA: Sí, conocía lo malo y lo bueno de esta profesión. En eso me siento privilegiada porque es un mundo que te puede asustar un poco, pero si lo has vivido desde pequeña y lo has visto desde fuera es todo mucho más fácil.

CH: Siempre que dos hermanos se dedican a lo mismo hay comparaciones, ¿Te dan miedo?

AA: Que nos comparen es difícil, porque aunque digan que nos parecemos somos muy diferentes en todo. Siempre nos van a comparar, hay que aguantarlo porque al final siempre nos comparan con alguien y nos van a criticar por lo bueno y por lo malo. Entre nosotras no hay ningún problema.

CH: ¿Te queda tiempo para el amor?

AA: Siempre hay tiempo para el amor.

CH: ¿Es difícil mantener una relación con esta profesión?

AA: Con esta profesión lo pasas mal porque estás lejos de la persona con la que quieres estar, pero al final siempre es mejor eso a estar con una persona en un sitio y que no sea la adecuada. Mientras haya un sentimiento fuerte y las dos personas apuesten por ello creo que nada es difícil.

CH: ¿Cómo se te conquista?

AA: Se me conquista sin hacer nada, siento natural, alegre y muy positivo. Ya está el mundo mal como para que la gente negativa se acerque. Me gusta que mi pareja no sea de mi mundo, sino que tenga su trabajo para poder aportarnos cosas.

CH: ¿No te gustaría tener una pareja que se dedicase a la moda?

AA: No, no me gustaría. No se sabe nunca, pero no creo que me gustase.

CH: Aún eres joven, pero ¿eres de las que sueña con vestirse de blanco?

AA: Más o menos, como me he vestido tantas veces de novia para trabajar no me hace tanta ilusión vestirme de blanco. Me hace ilusión hacer una fiesta por todo lo alto con mis amigos en una playa, celebrar la fiesta del amor. Lo de ponerme el vestido ya lo tengo muy asumido (ríe).

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