Una semana después de darle el «sí, quiero» a David Muñoz, la presentadora celebra su 27 cumpleaños y se muestra encantada con su nueva vida: «Estoy feliz, enamorada y por fin casada».
Con un fantástico ramo de rosas rojas. Así se despertó el 30 de octubre de 2015 Cristina Pedroche, que cumple 27 años y lo hace, por primera vez, como mujer casada. La presentadora le ha agradecido el detalle a su recién estrenado marido, David Muñoz, con un tierno mensaje:
«Empezar mi cumpleaños así es magia, como todo lo que tocas, David». Lo han celebrado con una romántica cena en Madrid en el restaurante Diverxo, propiedad del chef, en la que, a buen seguro, no faltarían las croquetas de su chico, el plato favorito de la vallecana. A la salida, Pedroche se mostraba radiante: «Estoy feliz, enamorada y ya por fin casada».
La presentadora de ‘Zapeando’ (laSexta) le dio el «sí, quiero» a su novio el sábado 24 de octubre de 2015 después de 10 meses de relación. Lo hicieron en la intimidad de su casa, con la única compañía de sus padres y vestidos con vaqueros y deportivas: «Yo solo quería la firma y ponerme el anillo. Me encanta la gente que dice que mi boda es cutre, aunque también hay otros que me dicen que les hubiera encantado casarse igual que yo. Solo queríamos hacer algo íntimo y no podía haber mejor sitio que mi casa», asegura la presentadora.
Se intercambiaron unas alianzas de oro negro, firmaron los papeles con unos lapiceros gigantes y, cómo no, derramaron alguna que otra lágrima al ver cómo su sueño se hacía realidad. Ella lucía, además, un colgante de su abuela, a la que estaba muy unida y que falleció hace un año.
Cristina y David acaban de regresar de India, donde viajaron por motivos de trabajo un día después de contraer matrimonio: «No ha sido una luna de miel, él tenía un viaje de negocios y le pude acompañar porque tenía unos días libres. Para mí, cada día que paso con David es una luna de miel y todas las noches son noche de bodas», confiesa Pedroche.
Comenzarán su nueva vida de casados en un piso que acaban de comprar en el madrileño barrio de Vallecas, donde se mudarán en las próximas semanas. Ahora quieren disfrutar el uno del otro, así que lo de ampliar la familia lo dejan para más adelante: «Me encantan los niños, siempre he querido ser madre y desde que conozco a David lo deseo con más ganas, pero de momento no. Ahora es mío y solo quiero que sea mio», concluye Pedroche.
