«Piensas, hasta aquí hemos llegado, y entonces es un momento muy fuerte en el que te viene la duda de si has hecho lo correcto. Yo he tenido siempre una preocupación muy grande de pensar si he hecho lo correcto, sí habré hecho las cosas como se esperaban» eran las dramáticas palabras de Rocío Jurado en su última entrevista en televisión antes de abandonarnos en el programa de Jesús Quintero, El loco de la colina.
Diez años después de su muerte las preguntas de la folclórica siguen sin tener respuesta, pero los hechos que han convertido a su familia en el centro de la prensa rosa hablan por sí solos. Rocío era el pilar de una familia que aparentaba estar unida, pero desde el momento en el que la cantante de Chipiona falleció las brechas empezaron a hacerse públicas y los escandalos llegaron como una ola.
ORTEGA CANO, DE LA CÁRCEL A REHACER SU VIDA
Muchos aseguraban que si Rocío no hubiese muerto se hubiera divorciado del torero José Ortega Cano, pero lo cierto es que a pesar de los rumores él estuvo a su lado hasta el último momento y tras su muerte le ha costado mucho levantar cabeza.
Mucho se ha comentado que tras su viudedad el torero se refugió en el alcohol, llevándole a tener grandes problemas y enfrentamientos con la prensa, pero el peor momento de Ortega llegó el 28 de mayo de 2011: el diestro conducía su vehículo en dirección a Yerbabuena, con la mala suerte de cruzarse con Carlos Parra, que perdió la vida en el acto cuando el viudo de Rocío invadió su carril. Esa misma noche Ortega fue intervenido en dos ocasiones, para luego permanecer durante un mes en la UCI del hospital sevillano Virgen de la Macarena.
Pero el peor toro de Ortega estaba por llegar. Cuando se empiezan a desvelar los secretos del accidente se descubre que conducía a 126k/h y triplicaba la tasa de alcohol en sangre permitida, por lo que la fiscalía le pedía cuatro años de cárcel por los delitos contra la seguridad vial y homicidio imprudente. Finalmente el 23 de marzo entraba en prisión hasta el 5 de junio de 2015, para volver a encontrarse con su actual pareja Ana María Aldón, madre de su primer hijo biológico, de 3 años, que ha conseguido aportar el equilibrio y amor que le faltaba tras la desaparición de Rocío.
A día de hoy José Ortega Cano se encuentra completamente recuperado de aquel fatídico accidente y de la vida que llevó hasta el momento, está centrado en el mundo taurino, su novia y sus tres hijos, con los que mantiene una excelente relación.
LA NO RELACIÓN DE SUS TRES HIJOS
Algo se les fue con ella a Rocío Carrasco, Gloria Camila y José Fernando que hace diez años no solo perdieron a su madre sino también la relación familiar.
Rocío Carrasco, es la primogénita de la cantante y según su círculo más cercano fue su gran obsesión. La hija que tuvo con el boxeador Pedro Carrasco desapareció de los medios y la vida pública, tras petición judicial, después de la muerte de su madre. Pero con el programa Hable con ellas, Rociito volvía a la televisión y sus intimidades y problemas familiares a la actualidad.
Rocío vive centrada en su marido Fidel Albiac y se ha alejado del resto de su familia, con la cual no tiene relación. La custodia de sus hijos con Antonio David ha recaido en el padre y no mantiene relación con ellos, a los que Antonio ha asegurado que desprecia. A esta guerra se suma Gloria Camila, que se posiciona totalmente con su sobrina y no duda en atacar a su hermana a la que define como «mala hermana y mala madre» y la acusa de no haber estado jamás para ellos, ni cuando eran unos niños. La relación entre Rociito y el resto de sus hermanos se fue con la Jurado, al igual que la relación con su tío Amador, por un problema con la herencia.
Aunque el entorno más cercano ha asegurado que José Fernando fue un niño conflictivo desde que le adoptaron, la desaparición de la figura materna y la falta de estabilidad de Ortega tuvieron como resultado la carne de cañón.
La mala vida de José Fernando ha ocupado horas de televisión; peleas, malas amistades y adicciones fueron el día a día de Josefer, que llegó a entrar en rehabilitación hasta en cinco ocasiones.
A día de hoy ha vuelto a vivir con su padre y se encuentra recuperado, según asegura su hermana Gloria Camila, que ha estado al lado de su hermano desde el principio. Pero no se olvida de su madre, y se ha tatuado su rostro hace menos de un mes en el brazo.
Gloria estudia Diseño de moda y aunque su vida se centra en su padre, sus hermanos y su novio Kiko, no duda en arremeter contra su hermana siempre que tiene ocasión.
ROSA BENITO Y AMADOR MOHEDANO, SE LES ROMPIÓ EL AMOR
Tras la muerte de Rocío el protagonismo recayó en Rosa Benito, la que había sido la peluquera de la cantante, saltaba a la televisión primero como colaboradora de El Programa de AR y después de Sálvame, donde comenzó el declive de su relación con Amador Mohedano.
Tras el paso de Rosa por Supervivientes, las infidelidades de Amador y la situación familiar y económica de Rosa se convirtieron en un culebrón de interés nacional, que cada día tomaba más dramatismo en el programa de Telecinco, hasta terminar Rosa dedicándole al padre de sus hijos Ese hombre que tú ves ahí… y quemando las alianzas con el que fue su marido durante 30 años en riguroso directo.
El divorcio de Rosa y Amador termino de dividir a la familia Mohedano, que tras muchas horas de televisión llegó a la cumbre de la polémica con un intento de suicidio por parte de la Benito.
Tras tomarse un descanso como colaborado en Sálvame, Rosa se recorrió los pueblos de España junto a su hija Chayo Mohedano versionando las canciones más célebres de Rocío, poniendo especial fuerza en Se nos rompió el amor.
Aunque me voy, no me voy… es el fandango que con más sentimiento cantaba Rocío Jurado en los últimos años y vaticinaba lo que sería su propio destino, porque aunque la más grande se fue hace hoy diez años, no se ha ido. Su música, su familia y su historia siguen todavía de plena actualidad, aunque dudamos que por unos motivos que agradasen a la artista.
