El metro de la Ciudad de México es un lugar donde pasa de todo, desde robos, peleas, venta de artículos y encuentros románticos hasta suicidios… y que un ataúd sea transportado en sus vagones.
Esta singular acción tuvo lugar el pasado martes, cuando cuatro usuarios del transporte subterráneo de la capital mexicana ingresaron a la estación Allende de la Línea 2 con un féretro, según recoge RT.
Los dos hombres y dos mujeres explicaron al policía que resguardaba la estación que no tenían dinero para pagar el flete, a lo que el oficial, identificado como Nicolás Hernández Hernández, les permitió el ingreso, informó el diario Excélsior.