Rondaban las doce de la madrugada cuando, tras escuchar de la boca de Toñi Salazar que ella solo respeta a su madre, Jorge Javier decidía sacar a relucir la doble faz de la ex de Roberto Liaño; y lo quiso hacer delante de Isabel Pantoja -y el resto de concursantes-, con quien hacía horas que había firmado la paz.
La historia se enrevesaba más todavía debido a que poco tiempo antes de este pacto de hermandad entre gitanas con carácter de hierro -por no llamarlo de otro modo-, las hermanas Azúcar Moreno hicieron un traje a Isabel, calificándola de altiva.
Cuando Jorge Javier decide poner el vídeo para que ésta vea la calidad de las personas con las que convive, Encarna y Toñi deciden ponerse a gritar y cargar contra otros compañeros que estaban en la palapa con el fin de que no se escuchara y, así, evitar las consecuencias de sus duras palabras que las dejaban absolutamente retratadas. –Isabel Pantoja, destrozada al descubrir la traición de las Azúcar Moreno–
Sin embargo, ni al presentador ni a la audiencia se nos escapa una y, tras tantas ediciones del reality, no es fácil engañar. Jorge Javier decidió repetir el vídeo para que Isabel Pantoja lo viera y, sobre todo, escuchara; eso sí, tuvo que ser durante la publicidad porque el show debía continuar.
