Anna Ferrer Padilla, hija de Paz Padilla, ya tiene nombre propio. Es conocida por el trabajo que desarrolla en sus redes sociales y la naturalidad con la que muestra su día a día a sus seguidores y seguidoras; de hecho, la naturalidad es eso que le ha llevado a contar en Instagram que no se encuentra del todo bien, que le ha inundado la melancolía al recordar la vida que llevaba hace tan solo un año. –¡Indignada!: Así ha respondido la hija de Paz Padilla al comentario machista de un seguidor–
Lo cierto es que la realidad de Anna ha dado un giro bestial, ya que pasó de vivir la época Erasmus -que vimos a través de los vídeos que subía a su canal de Youtube- a trabajar en el departamento de cuentas de Mediaset y eso… eso entristece a cualquiera.