Podría haber alcanzado la cima del estrellato. Su apellido denota arte y, en su día, llegó a instalarse en la escena junto a colegas como Javier Bardem o Antonio Banderas. Protagonizó el mítico filme ‘Carne trémula’ (1997) del gran Almodóvar y llegó a acariciar el Goya como mejor actor revelación por ‘Tranvía a la Malvarrosa’ de Jose Luis García Sánchez.
Liberto Rabal fue un referente artístico en España y, ahora, veinte años después, la vida le ha cambiado por completo. Un giro tan drástico que, según informa el suplemento LOC de El Mundo, actualmente trabaja en el Ikea de de la calle Goya de Madrid, donde mantiene buenas relaciones con sus compañeros y «nunca ha alardeando de ser ‘nieto de’, ‘sobrino de’ o ‘hijo de'».
Una aglomeración de coyunturas desfavorables le condujeron a la posición que hoy ocupa: vendedor y coordinador de pedidos de la compañía sueca. Sin embargo, él es feliz con lo que tiene y con la familia que ha formado junto a a la escritora Adriana Davidova, con quien tuvo hace 21 años a su hijo Daniel.