No es la primera vez que le ocurre a la Reina. Los diseños que luce con la elegancia innata a la que nos tiene más que habituados son calcados por firmas y diseñadores alrededor del globo. Pero hay reproducciones y fusilamientos. Tal y como diría la gran Rosalía, «todo lo que me invento me lo trillan» y, seguramente, algo similar se le ha debido pasar por la mente a Felipe Varela al ver el vestido bicolor con estampado oriental que lució doña Letizia en los Premios Princesa de Asturias 2017 (casi) plagiado por una tienda madrileña.
Hasta la fecha, la que, con toda probabilidad, fuera la creación más codiciada del modisto era prácticamente inalcanzable para los ciudadanos de a pie. Y digo hasta ahora porque un establecimiento local de la capital ha imitado a todo detalle la prenda, que está confeccionada con exactamente el mismo tejido y corte que el original.
El negocio tiene el nombre de Mercedes Guerrero y, a pesar de que no comercia con diseños propios, distribuye los de otras firmas.