Es la prenda ideal para las mujeres a las que les gustaría hacer ‘topless’ pero no se atreven. Se llama ‘Tata Top’, y es una moda que podría haber venido para quedarse en las playas españolas.
De momento, pocos han visto en directo estos atrevidos bikinis que simulan la forma y color del pecho femenino, pero sin lugar a duda no dejan a nadie indiferente.
La idea surgió de las mentes de Robyn Graves y Michelle Lytle, dos feministas inspiradas en el movimiento ‘Free Nipple’ (libera al pezón) de Scout Willis.
EL OBJETIVO
El objetivo que buscan a través del ‘Tata Top’ es defender el derecho de la mujer a elegir la manera en la que presenta su cuerpo sin ser juzgadas o censuradas por ello.
Además, del precio de venta del sujetador (28 dólares, unos 20,5 euros), cinco dólares irán a parar a una fundación que investiga el cáncer de mama.
El ‘Tata Top’ es una parte de arriba de un bikini como cualquier otra en cuanto a su forma, pero el diseño es de lo menos habitual. Sobre un fondo color carne -hay varias gamas cromáticas para que cada clienta utilice el más parecido a su piel- se dibujan las aureolas de los pezones en tonos rosados.
A primera vista, y sin acercarse mucho, la sensación que se busca es que parezca que la mujer está haciendo ‘topless’.
«Lo importante de este producto es que si la gente mira a su alrededor y ve estos sostenes, entonces será más natural ver a quien esté legítimamente en topless»,
informó Michelle en una entrevista realizada por Salon.