Al joven Doug Adams se le ocurrió masturbarse frenéticamente durante un vuelo de Virgin America, que cubría el trayecto de Boston a Los Ángeles.
Lo hizo durante estas últimas horas al lado de una de las pasajeras a quien, tras dedicarle una serie de ‘improperios’ obscenos a modo de disimulado susurro, no le quedó otra más que ponerse a dar alaridos: «No paraba además de decirme cosas sucias.»
A POR OTRA
En vista del escándalo, -el de la pasajera según el punto de vista del pervertido-, decidió cambiarse presto de asiento sin darle tiempo siquiera a subirse la cremallera, haciendo lo propio con otra fémina que a punto estuvo de sufrir un síncope a decir de varios testigos.
TOCATA Y FUGA
Tras estar un rato ‘dale que te pego’, las azafatas lograron reaccionar antes de que la cosa pasara a mayores, indicándole que cejara en tamaña actitud. El aludido respondió lanzándose contra la puerta de emergencia, que trató de abrir sin éxito para fortuna del pasaje.
A bordo viajaban tres policías, quienes lograron finalmente reducirle a tortas y detenerle.
LA COMPAÑÍA SE HACE LA SUECA
Lo más extraño del caso, si cabe, y a decir de ‘nbclosangeles‘, es que la compañía asegura ahora que el aterrizaje de emergencia fue causado por una «emergencia médica», aunque en el informe policial no pone lo mismo, algo que queda además en evidencia en el vídeo que acompaña estas líneas.
El ‘loco’ de turno fue conducido a un hospital con cargos de exhibicionismo, conducta inapropiada y violencia en un avión.
