Andrew Wardle de 40 años, conoció a Fedra Fabian, de 25, en un campamento inglés de vacaciones en Skegness.
La relación iba viento en popa, a pesar de que ella vivía en Hungría y él en Inglaterra. Aún así, se las ingeniaban para verse muy a menudo y, siempre que estaban a punto de irse a la cama, él ponía la misma excusa:
«Me decía que tenía problemas renales y me dijo que era por eso que no podía tener relaciones sexuales».
UN TRISTE HISTORIA
Pero detrás de todo eso se ocultaba una triste historia:
Wardle había nacido con una extraña condición llamada extrofia vesical, padecimiento que lo dejó con la vejiga fuera de su cuerpo y además sin pene.
Por eso le abandonó su madre, y fue adoptado por una familia, quienes le llevaron a varios especialistas.
Actualmente espera varias cirugías para poder tener órganos genitales.
Y después de un año le confesó a su novia la verdad:
«Se atrevió a contármelo sin que yo lo obligara».
Fedra Fabian dice no sentirse traicionada en absoluto, y le está dando todo su apoyo.