Le descubrieron las fotos de casualidad, cuando la Policía de la norteamericana localidad de Bradenton, en Florida, realizaba una investigación a raíz del envío masivo de material pornográfico vía WhatsApp.
En una de las inspecciones, según revela el expediente al que se puede acceder pinchando aquí-, y según se hace eco ‘Smoking Gun‘, encontraron una serie de fotos en el móvil de Ashley Miller, de 18 años, vecina del citado lugar.
SEXO ORAL
En éste encontraron en los archivos los álbumes ‘2-face fun’ y ‘Me’, en los que había fotos de un pitbull haciéndole sexo oral en la cama de la habitación.
Miller confirmó a la Policía que ella era la mujer involucrada con la mascota, una hembra llamada 2-face.
Según la declaración jurada, había hecho esto con la perra durante cinco años, entre 30 y 40 veces en total, las últimas cuando ella ya era mayor de edad.
En entrevista, la adolescente confesó a la policía que lo mismo había hecho con su perro anterior, Scarface, una cruza de pit bull y rottweiler.
Llevaba a cabo estas repugnantes prácticas en casa de su abuela, donde vivía la mascota, por lo que tenía que encerrarse en una habitación «en sesiones de entre diez y quince minutos».
La joven dijo que la perra «ponía el hocico en su vagina por su cuenta» y que ella nunca la obligó ni la «tocó sexualmente».
Miller fue detenida «por actividades sexuales con animales» y salió tras pagar una fianza de mil dólares, pero tiene que ir el 14 de julio de 2015 a la lectura de cargos.
