Está de moda, aunque se maten a palos. El caso es grabarlo todo, y luego subirlo a las redes sociales como quien hace una gracia.
El último vídeo al respecto, -prohibido no obstante en los habituales canales-, tiene como protagonistas a dos mujeres que se dan una paliza de espanto en un aparcamiento de algún lugar de Estados Unidos.
¿La razón? Una ha descubierto que la otra le está poniendo los cuernos… y viceversa.
El caso es que se dan de patadas y puñetazos dejando al descubierto sus partes íntimas: no llevan bragas y quizás no contaban con que acabarían por los suelos culo en pompa.
Sus amigotes no hacen nada por intervenir, y al final lo dejan ellas mismas, más moradas que un calabacín…