Es lo que tienen las apuestas, que por muy seguro que estés de las mismas siempre hay un factor de riesgo que te puede hacer perder un verdadero dineral.
Pues bien, un club de alterne de Alicante se las prometía muy felices el 30 de noviembre de 2016 cuando aprovechando el enfrentamiento de la ida de dieciseisavos de final de la Copa del Rey entre el Hércules y el Barcelona prometía a sus clientes barra libre desde el final del partido hasta el cierre del local si el conjunto del Rico Pérez era capaz de empatar o ganarle a los culés.
La lógica indicaba que entre un equipo como el levantino, en Segunda División B, y un Barça, pese a las muchas ausencias, el resultado sería claramente visitante.
Craso error por parte de los dueños del club de alterne. 1-1 fue el resultado final y el champán corrió como si no hubiese un mañana entre los clientes que, atraídos por la oferta, decidieron ver ahí el partido. Eso sí que fue un auténtico y verdadero ‘final feliz’.