No estaba contenta con lo recaudado para el ajuar, así que se le ocurrió una idea para llenarse los bolsillos y, de paso, dejar contentos a sus invitados.
Es una joven novia tailandesa, que decidió dejarse tocar las tetas por los presentes, féminas incluidas, con tal de ganar dinero. Ya vaya si lo logró.
Alegre y dicharachera se llena las manos de billetes mientras todos la soban a gusto.
Una boda de alto copete.