Era un rumor y, ahora, es un clamor. Y algunos, los que no tienen la mínima simpatía a la antisistema Ada Colau y nulo afecto al navegante Oscar Camps, de lo que hablan es del papelón del marido de la alcaldesa, el desventurado Adrià Alemany.
Todo empezó con un run-run sobre la separación de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, a la que los más osados atribuían una tibia relación sentimental con el fundador de Open Arms.
Y, de ahí, a los a los titulares de prensa, porque el personal asegura que hay tomate y del bueno.
Lo que parece innegable es que la situación personal de la regidora -casada y con dos hijos- y defensora de las relaciones sexuales abiertas, pasa como mínimo por un momento familiar complicado.
Y que el buen rollo entre Colau y el patrón del buque dedicado al rescate de los refugiados -que tanto molesta a Salvini y tantos problemas causa a Sánchez- va más allá del apoyo que la alcaldesa le brinda con dinero público.
El diario El Mundo, que en estos temas pone la bala donde ha puesto antes el ojo, no se corta un pelo y dedica al asunto una página del suplemento rosa titulada así: ‘Ada Colau, muy cerca de Óscar Camps‘.
De acuerdo con estas informaciones, Colau, de 45 años, estaría Colau por el ‘intrépido capitán‘, 11 años mayor que la política.
El tipo, para que no haya equívocos, es el mismo Óscar Camps, el mismo que hace tres años recibió de manos del prófugo Carles Puigdemont el trofeo de Catalán del Año y al que sus trabajadores demandaron por incumplimiento de contrato.
Por cierto, que ese juicio lo perdió el solidario‘ Camps.
La alcaldesa de Barcelona ha cargado contra el diario El Mundo por la publicación del ‘revelador’ reportaje en el que se ahonda en su vida privada:
Ejemplo de pseudo periodismo difamatorio y machista. Mentiras, insinuaciones y el estigma “puta” como ataque a las mujeres.
Seguiremos haciendo políticas feministas y seguiremos apoyando a quienes salvan vidas, por mucho que moleste a la caverna https://t.co/X4utHXujva— Ada Colau (@AdaColau) September 14, 2019
En esto de los amores y, a pesar de su pinta de mosquita muerta, Ada Colau tiene hemeroteca. En su día, desveló haber tenido un rollo muy tierno con otra mujer, una chica italiana, una relación que se acabó por desgaste y por la distancia.
En 2016, en respuesta a una noticia sobre una violación, Ada Colau dijo que a ella también la habían intentado violar por la calle a los 16 años. Dos veces.
Cuando Ada Colau contó hace dos años que había tenido una novia y dejó a una parte de España ojiplática, muchos la aplaudieron por salir del armario, entre otros, su pareja Adrià Alemany, padre de sus dos hijos, Luca y Gael.
Alemany, también activista y miembro de Barcelona en Comú, dijo entonces que conocía perfectamente esa relación de Colau.
La alcaldesa y Adrià se conocieron a principios de la década del 2000 y vivieron su pasión entre mítines y campañas electorales, sobre todo, para denunciar la escasez de vivienda en Barcelona debido a la burbuja inmobiliaria.
Licenciado en Economía por la Universitat Pompeu Fabra, máster en Relaciones Internacionales e Integración Europea del IUEE-UAB, el ‘primer caballero’ de Barcelona vive por y para el partido que sustenta la figura de su mujer y antes trabajó en la Fundación del FC Barcelona.
La pareja de la alcaldesa se toma muy en serio la militancia y la responsabilidad de su mujer.
Declaró Alemany en un reportaje publicado en The New York Times no hace mucho que no van al cine y que el activismo es su vida:
«No tenemos cenas románticas».
Tal vez deberían, como subraya Informalia.